La Consejería de Sanidad y el Comité de Huelga de Atención Primaria de AMYTS siguen negociando el detalle de cómo se plasmarán los acuerdos de salida de los paros. Esta semana se ha abordado uno de los puntos esenciales para el primer nivel: la eliminación de la burocracia relacionada con la covid-19.
El principio es el siguiente: "Nosotros sólo queremos ver a los positivos enfermos, porque es para lo que nos han formado", explica Silvia Durán, coordinadora de delegados de Amyts y una de las representantes de dicho comité.
En la actualidad se están realizando 950 bajas de contactos covid-19 al día. Bajas que en la mayoría de casos son "bajas preventivas de personas sanas".
Por eso, Amyts ha reclamado a la Consejería que Inspección Médica se encargue de tramitar esas incapacidades temporales (IT), como ya se ha acordado en Navarra, País Vasco y Baleares.
En cualquier caso, el sindicato médico también ha pedido potenciar la figura del gestor de casos covid-19 que, a juicio del sindicato, son un "mero organizador del flujo de pacientes". En ese sentido, Sanidad ya estaría formado a unos 224 de los 500 que hay actualmente para que se encarguen de los procesos asistenciales de los que no sean positivos sintomáticos.
Además, se baraja la posibilidad de que los trabajadores especialmente sensibles y que están de baja por falta de adaptación al puesto de trabajo puedan incorporarse como gestores, a ser posible la próxima semana. En agosto había una veintena de trabajadores teletrabajando por esta circunstancia, según Durán, aunque a Amyts le constan que unos 150 facultativos han pedido adaptación al puesto por esa circunstancia.
Concretamente, el algoritmo propuesto sería el siguiente, explica la portavoz de Amyts: el usuario que alerte de que puede tener síntomas o ser un contacto estrecho de covid tendría que acudir a uno de los 28 puntos centralizados (en lugar del centro de salud) para que una enfermera le haga la prueba diagnóstica. Se le darían instrucciones y si es positiva, se le citaría de nuevo para el rastreo de contactos, de los que se encargaría el gestor de casos.
En cuanto a la baja de los positivos, para las empresas de liquidación indirecta, se entregarán en el centro de salud por el departamento administrativo; para las empresas de liquidación directa, es el INSS quien entrega directamente los datos a las empreas y además se colgará en la carpeta de salud del paciente, para que lo vea y la imprima.
Además, se elimina el parte de confirmación del 7º día, dado que la baja por covid-19 son de 10 días.
La equiparación salarial, a partir de noviembre
Por otra parte, un punto del acuerdo que sí se pondría en marcha inmediatamente será la equiparación salarial de los médicos de Familia, pediatras, psicólogos y odontólogos a los médicos hospitalarios (5.757,24 euros lineales anuales, 479.77 euros al mes). El compromiso, según el sindicato, es que sea efectiva en noviembre, ya se pague en la nómina de este mes o de forma retroactiva.
Otros puntos acordados son que a partir del 1 de diciembre se ponen en marcha los módulos de 4 horas por 200 euros, aunque Sanidad seguiría sin extenderlos a los Servicios de Atención Rurales (SAR) y la implementación de los turnos bisagra. Además, se propondrá elimitar el requisito de un 70% de apoyo en los centros para autorizar los turnos deslizantes.
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