Enfermería tiene un papel fundamental en el seguimiento y control de múltiples patologías y pacientes, en especial algunos tan sensibles como los diabéticos. En este contexto, las enfermeras Alicia Gamboa y María del Mar Marco, que han finalizado su residencia en la Unidad Docente del Hospital General de Castellón -CS de Alcora y Villarreal, respectivamente-, han desarrollan el proyecto Impacto de la pandemia por Sars-CoV-2 en la hemoglobina glicosilada de pacientes diabéticos tipo 2.
El trabajo, galardonado con el IV premio Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (Cecova) de investigación para residentes de Enfermería Familiar y Comunitaria, pretende comprobar el grado de impacto real de la falta de seguimiento enfermero del colectivo durante la pandemia.
La educación diabetológica impartida por la enfermera de atención primaria (EAP) es clave para empoderar a los pacientes, que adquieran habilidades y recursos que les permita gestionar su enfermedad. En concreto, las funciones que se realizan desde los centros de salud son, según recoge el proyecto presentado, "la implantación de programas de prevención y detección precoz de la enfermedad, tratamiento y seguimiento de manera individual".
Por otro, lado también es su competencia la realización de sesiones de educación grupal que permita la adquisición de habilidades y autocuidados para gestionar la enfermedad, además de actividades comunitarias que promocionen la adherencia a la alimentación saludable y el ejercicio regular, evitando en muchos casos que la enfermedad progrese y origine complicaciones o que se consolide como enfermedad. Sin embargo, la realidad de la pandemia truncó este enfoque.
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