Tener más visibilidad y llegar a más gente son retos que tienen las oficinas de farmacia en las redes sociales. En ocasiones, para pisar el acelerador a la hora de conseguir esa notoriedad digital se puede recurrir a la publicidad on line. Con una pequeña inversión en las principales plataformas de las redes sociales, la oficina de farmacia puede lanzar sus mensajes a mucha más gente y puede elevar el número de seguidores.
Eso sí, en este campo de la publicidad on line hay que ir con pies de plomo, debido a que hay un laberinto normativo que no aclara muy bien qué es lo que se puede hacer y lo que no. En función de las comunidades, la normativa es más o menos laxa. Rosa Blanco Cuevas, de Orbaneja Abogados, explica que en Madrid el marco normativo es más flexible, mientras que otras comunidades, como Galicia, es mucho más restrictivo. "Las páginas web de farmacias son más fáciles de controlar en este sentido, pero las promociones en redes sociales tienen más complicación a la hora de hacer un seguimiento", especifica.
La norma en Galicia, a través del decreto 107/2008, dice que "se prohíbe de forma expresa la realización de promociones que puedan contribuir a favorecer el consumo de medicamentos o productos sanitarios". En el caso de la Comunidad de Madrid, el art. 22 de la Ley 13/22 de Ordenación y Atención farmacéutica, recoge "las oficinas de farmacia podrán utilizar páginas web corporativas, además de otras herramientas que proporcionan las nuevas tecnologías, para comunicar y publicitar funciones y servicios propios, información sobre consejos farmacéuticos y desarrollo de la venta on line en parafarmacia, productos sanitarios y medicamentos no sujetos a prescripción de acuerdo con su normativa específica".
No obstante, Paloma Sastrón, de Starfarma, especifica que los colegios que más actúan en este sentido, en el peor de los casos, piden al farmacéutico que retire la publicidad y no hay sanciones. Normalmente, las denuncias suelen ser de otros colegiados, especifica Sastrón, mientras que califica de injusto "que farmacéuticos de diferentes comunidades tengan desventaja en este sentido y unos puedan hacer publicidad en redes y otros no", denuncia Sastrón.
La farmacia puede publicar contenido en sus perfiles de redes sociales sobre consejo farmacéutico o producto, pero, si esos mensajes los quiere promocionar pagando, es cuando deberá consultar bien la normativa de su comunidad al respecto.
La oficina de farmacia lo primero que tiene que hacer es saber a qué público quiere llegar y, para ello, deberá escoger entre las diferentes redes sociales, explica Antonio Acevedo, jefe de proyectos de Smartup. "La farmacia tiene más arraigo en redes sociales como Facebook e Instagram, ya que otras como Twitter y TikTok son más para un público más joven, que no es usuario recurrentes de la farmacia”, especifica Acevedo.
Sastrón coincide con Acevedo en la idoneidad de anunciarse en Facebook e Instagram. "Las dos redes sociales son de la plataforma Meta y anunciarse en ellas es más económico y te permite medir y evaluar los resultados de forma más clara", apuntala Sastrón.
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