Las Consejerías de Sanidad y de Hacienda de la Comunidad de Madrid, así como los representantes de los sanitarios en formación, alcanzaron el 10 de agosto un preacuerdo que puso punto final a las huelgas convocadas por los residentes, que arrancaron el 13 de julio.
Los MIR son el grupo más numeroso e impulsor de esta iniciativa, pero no el único. También han estado secundando la huelga los EIR, FIR, BIR y PIR con el mismo objetivo: luchar por mejorar sus condiciones laborales y formativas.
David Bermejo Martínez, presidente de la recién creada Asociación Madrileña de Enfermeros y Residentes de Enfermería Familiar y Comunitaria (Amerefyc) y R2 de Enfermería Familiar y Comunitaria del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, es uno de los dos profesionales de enfermería que forma parte del Comité de Huelga de los residentes.
Reconoce que la adhesión de los EIR al convenio se realizó “algo tarde” y se formalizó mediante una adenda firmada el 7 de julio de 2020 por la secretaria del comité de empresa del personal en formación.
-PREGUNTA: ¿Por qué los EIR se adhirieron tarde al convenio?
-RESPUESTA: El convenio se empezó a elaborar hace tres años. Los residentes se pusieron en contacto con los EIR, que entonces no se animaron a sumarse a la lucha. Este mayo, cuando el resto de los residentes establecieron sus reivindicaciones, desde Amerefyc nos dimos cuenta de que muchas de ellas nos afectaban y nos podrían beneficiar. Fue entonces cuando, desde esta asociación, iniciamos los contactos con el resto de EIR de otras especialidades a través de las redes sociales y conocidos.
Fue un periodo difícil, en el que las reuniones eran telemáticas y los EIR nos encontrábamos muy cansados, aunque quizás esto, sumado al olvido sentido durante la pandemia por parte de la Administración, fue lo que hizo que nos sintiéramos tan apoyados y nos pusiéramos a trabajar en ello.
-P: ¿Por qué cree que la propia Enfermería no tiene clara la participación de los EIR en esta ‘lucha’ y sí la de los MIR?
-R: Sin duda, la tardía adhesión de los EIR es el punto principal que hace que no se sepa que también estamos luchando por nuestros derechos. Además, el mundo EIR, especialistas de enfermería o cuidados especializados son conceptos muy desconocidos para la población en general. También hay que tener en cuenta que en proporción los EIR somos menos que los MIR y los medios de comunicación se centran únicamente en ellos. En los centros docentes donde hay residentes de enfermería sí que se conocen nuestras reivindicaciones y nuestra adhesión al convenio.
-P: ¿Qué sindicatos os están apoyando?
-R: Ningún sindicato exclusivo de enfermería ha mostrado su apoyo de manera explícita a los EIR. Sí afirman estar a favor de las especialidades, pero no luchan por nuestros derechos y siempre que acudimos a alguna sede sindical su desconocimiento de nuestra situación y su indiferencia hacia todo lo que sea EIR es muy notorio. Los que sí lo han hecho son los que apoyan de manera general a todos los residentes (CCOO y UGT), sin distinción entre especialidades.
Desde Amerefyc nos hubiera gustado contactar con los sindicatos de enfermería para que se sumaran a la lucha, pero no hubo tiempo suficiente desde la adhesión hasta la convocatoria de huelga.
-P: ¿Qué piden los EIR?
-R: Lo mismo que el resto de residentes. Pedimos una subida salarial, ya que cobramos un sueldo base de entre 900 y 1.000 euros, el resto depende de las horas de guardia realizadas, que se paga a 8 y 11 euros aproximadamente. En Enfermería Familiar y Comunitaria, por ejemplo, se suelen hacer entre 45 y 55 horas mensuales de guardia, pero hay en otras especialidades que son muchas menos y su sueldo apenas se ve incrementado.
“El cansancio y el olvido sufrido por parte de la Administración durante la pandemia ha sido un detonante para impulsar nuestra adenda”
Además del aumento del salario se solicita cobrar los trienios, cubrir desplazamientos en formaciones obligatorias y recibir dietas durante las jornadas de guardia, entre otras peticiones.
Otro punto importante en materia salarial es el cobro completo de la paga extra, como ha rectificado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, ya que hasta ahora cobrábamos la mitad.
En cuanto a la formación, se piden 15 días de formación al año, dos meses de rotación externa y derecho a acudirá un congreso científico anual.
En el ámbito social se solicita cobrar un prorrateo de las guardias durante el periodo de baja, ayudas al alquiler y cobrar el 100% de la baja desde el primer día.
-P: ¿Cuántos EIR están involucrados en mejorar sus condiciones laborales y formativas?
-R: En la Comunidad de Madrid hay más de 400 EIR entre todas las especialidades.
-P: ¿Os apoyan los tutores y profesionales de enfermería?
-R: Sí. Conocen nuestras condiciones, jornadas laborales, cargas de trabajo y plan formativo. Sin duda el mayor apoyo lo estamos recibiendo de las compañeras que se encuentran más cercanas a la formación EIR, como son nuestras tutoras o las enfermeras ya especialistas.
-P: ¿Qué especialidades EIR están más involucradas en esta ‘lucha’ y por qué?
-R: Todas, aunque las más visibles somos Enfermería Familiar y Comunitaria y Obstétrico-Ginecológica, también porque somos las más numerosas, aunque hay compañeras concienciadas y luchadoras en todas las especialidades.
-P: El 10 de agosto se firmó el preacuerdo por el que la Administración se ha comprometido a aceptar algunas de nuestras reivindicaciones…
-R: También se ha comprometido a fijar un calendario de reuniones la primera semana de septiembre para acometer los compromisos que requieran un desarrollo posterior por no haber llegado a acuerdo hasta la fecha.
“La tardía adhesión de los EIR es el punto principal que hace que no se sepa que también estamos luchando por nuestros derechos”
El preacuerdo toca los puntos esenciales de las reclamaciones retributivas y formativas de los EIR, como que las pagas extraordinarias serán por un importe igual a la suma del sueldo mensual y el complemento de grado. Este, además, se modifica con efectos de 1 de septiembre de 2020, incrementándose en 120 puntos para todos los residentes de primero a quinto año. También se ha acordado que los residentes reciban, por una sola vez, la cuantía de 460,96 euros que se abonará antes del 31 de diciembre de 2020.
Respecto a las reclamaciones formativas, los EIR destacamos el acceso a las actividades formativas contenidas en el plan de formación continuada de la Consejería de Sanidad de Madrid, con certificado de asistencia y horas lectivas; incrementar la oferta formativa del plan formación transversal de formación sanitaria especializada y tener derecho a disponer de un número de días de cursos -al menos 15 al año- y el cómputo de la asistencia a cursos obligatorios de tarde como jornada laboral.
-P: ¿Crees que vuestras reivindicaciones se van a extender a los EIR de otras autonomías?
-R: Sin duda, es una creencia y un deseo, además animo desde aquí a que se sumen a las luchas que se han iniciado en otras comunidades autónomas como Castilla y León o Valencia para mejorar nuestras condiciones y sobre todo las de las futuras residentes, y para dar a conocer que enfermería también se especializa y que se los cuidados especializados no son solo el futuro, sino también el presente.
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