Tras conocer la Resolución de la Dirección General de Recursos Humanos y Relaciones Laborales del Sermas de 28 de diciembre, el Codem califica de un nuevo maltrato la situación de las enfermeras afectadas por el cierre de antiguos centros (SUAP y SAR).
"La movilidad forzosa de estos profesionales, debido al cierre de estos centros y a la apertura de los nuevos PAC, tal y como recoge dicha Resolución, prevé realizarse mediante un proceso de adscripción voluntaria, o en su defecto mediante adscripción directa, para lo que se da un plazo de 10 días hábiles desde la publicación de la misma", explican desde la corporación colegial.
Añaden que rechazan este proceso, sea por adscripción voluntaria o no, "ya que implica la movilidad forzosa de los profesionales por el cierre de los centros en los que hasta ahora estaban prestando atención sanitaria, con las consecuencias (laborales, económicas, familiares, de conciliación, etc.) que esos cambios suponen. Este proceso, además, se ha puesto en marcha en plena Navidad obligando a enfermeras y resto de profesionales a elegir su nuevo destino a ciegas, pues no se dan a conocer previamente las condiciones laborales de los nuevos destinos ni la organización de las planillas".
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