El Consejo General de COF y la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (Sefap) han firmado esta semana un acuerdo, con el fin de avanzar en la colaboración y desarrollo de acciones conjuntas en torno a una serie de objetivos compartidos.
Ángel Mataix, presidente de Sefap, y Raquel Martínez, secretaria general del Consejo, analizan con CF cómo es y cómo debería ser la colaboración entre ambos profesionales para beneficio del propio paciente. El primero califica la relación entre farmacéuticos de atención primaria y comunitarios de "excelente" y defiende que ambos "son dos profesionales que en su labor diaria están perfectamente conectados porque persiguen los mismos objetivos, como la seguridad del paciente, la optimización del tratamiento...". Aunque, añade, que, como todo, también esta colaboración "siempre es mejorable".
Para Martínez, esa mejora viene de la mano de la Administración, y se explica: "Cuando se desarrolla esa colaboración el éxito está siempre garantizado. Sin embargo, necesitamos que esa coordinación se articule por las administraciones para que se generalice, como está contemplado en el Marco Estratégico de Atención Primaria y Comunitaria. Sin duda, potenciar esta colaboración redundará en una mejora en el uso responsable de los medicamentos".
Esa colaboración no es posible si no se dispone de vías de comunicación efectivas, que, según Mataix, ya existen, aunque como la suerte, esto también va por varios o mejor dicho por comunidades autónomas. "Dependiendo de las comunidades y de los ámbitos de gestión esas vías de comunicación están más o menos desarrolladas. En cualquier caso, no hay ningún problema de comunicación entre ambos; siempre están a disposición de las farmacias comunitarias los correos y los teléfonos, si no hay otra vía más específica, para contactar con el farmacéutico de atención primaria y al revés, el farmacéutico de atención primaria dispone de los datos de contacto de las oficinas de farmacia para resolver cualquier duda o incidencia".
Para Martínez, "la vía más efectiva es arbitrar módulos de comunicación directa". Y, como opina Mataix, también dice que cada autonomía y cada administración "tiene la llave de cómo hacerlo". Para el Consejo, al que representa, "el sistema de receta electrónica tiene grandes posibilidades para configurarse cómo la herramienta más adecuada de comunicación entre niveles asistenciales. Así lo contemplamos en la agenda digital como el primero de los 28 proyectos que contiene". A su juicio, se necesita "desarrollar nuevas funcionalidades de la receta electrónica pública para contar con un modelo de comunicación formal sobre el tratamiento de los pacientes".
Ambos profesionales coinciden en que farmacéuticos de atención primaria y comunitaria están llamados a colaborar en "la seguridad del paciente y la optimización de su tratamiento", dice Mataix. En concreto, Martínez señala cuestiones concretas como "la conciliación de la medicación, la mejora de la adherencia y la reducción de la utilización inadecuada de los medicamentos". Y es que al final tanto unos como otros, tienen "el mismo objetivo: resolver cualquier incidencia con el tratamiento del paciente para mejorar su seguridad".
Pero también para esto Martínez hace una petición. "Es necesario desarrollar protocolos conjuntos de trabajo que faciliten esta colaboración".
Experiencias sobre el terreno
A los dos representantes se le pide que destaque alguna experiencia que demuestre con datos que esa colaboración es real y, sobre todo, efectiva. En este caso, Martínez menciona una que, además, ha arrojado resultados recientes y que está en marcha desde hace años. "Una de las experiencias que, sin duda, ha sido muy importante es la desarrollada en el ámbito de la conciliación, en el marco del programa Concilia Medicamentos 2. En el estudio han participado 145 farmacias y diez hospitales, con un total de 204 farmacéuticos comunitarios, hospitalarios y/o de atención primaria y 622 pacientes. Sus resultados hacen patente que la intervención del farmacéutico a través del Servicio de Conciliación de la Medicación al alta hospitalaria es efectiva, con más de 860 intervenciones, un 80% aceptadas por el médico, que facilitaron en un 96,2% la continuidad asistencial a mayores de 65 años, pluripatológicos, polimedicados, y que habían permanecido ingresados durante unos diez días".
Mataix invita a asomarse a los diferentes congresos que tanto farmacia comunitaria como de primaria organizan para ver que "siempre aparecen comunicaciones y posters que hablan de la coordinación entre farmacéuticos comunitarios y de primaria". Y añade: "Si se desea hacer algo más desarrollado se podría hacer y hay voluntad de ello tanto por el Consejo General de COF como por las sociedades profesionales de comunitaria y de farmacia de atención primaria por intentar desarrollar algún proyecto ambicioso que pueda medir de manera cuantitativa las ventajas de esta colaboración".
Esta posición también la corrobora Martínez, quien sostiene que "efectivamente, el convenio firmado da cabida al desarrollo de proyectos o programas así. Se trata de un acuerdo marco en el que se contempla la puesta en marcha de actividades en el ámbito de la formación e información, actuaciones coordinadas ante las administraciones sanitarias, la celebración de conferencias y reuniones científicas, la realización de publicaciones o líneas de actuación/investigación, así como cualquier actividad en el campo de la investigación científica y técnica relacionada con los medicamentos y productos sanitarios.
Respecto a la formación, el presidente de Sefap asegura que desde su sociedad científica trabajan "mucho la formación y es un aspecto que se puede desarrollar con farmacéuticos integrados dentro del Consejo. Estamos abiertos a cualquier tipo de formación que el Consejo quiera promover".
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