María Concepción Jiménez Alonso ha personificado el chupinazo de la receta electrónica concertada con Muface en Baleares, con la primera dispensación (un paracetamol) el pasado 12 de marzo: "Hace tiempo que lo estamos esperando, tras 35 años con papeles. Hasta ahora iba al médico con el talonario, el médico lo cumplimentaba y me iba a la farmacia. Esto es mucho más cómodo", explica a este medio. El colectivo mutualista adscrito al servicio provincial de Muface en Baleares que recibe asistencia sanitaria con entidades de seguro (opción concertada) está formado por 16.136 personas (11.707 titulares más 4.429 beneficiarias).
La receta concertada de Muface está presente ya en ocho comunidades autónomas. Aparte de Baleares, el resto son: Cantabria (la pionera), Asturias, Canarias, La Rioja, Extremadura, Navarra y Murcia. Esto supone la implicación de casi 4.000 farmacias, con cerca de 600.000 dispensaciones y más de 1,1 millones de operaciones (dispensaciones y consultas relacionadas), según datos del Consejo General de COF.
La receta concertada de Muface está presente ya en ocho comunidades autónomas. Aún faltan Isfas y Mugeju
Desde el comienzo, con poco más de 20 años, Jiménez Alonso, que también tiene a su hijo de beneficiario, optó por la asistencia privada: "Ahora he pasado de Asisa a Adeslas. Siempre opté por la atención concertada, pero la sanidad pública no me merece menos confianza. Lo que ocurre es que la sanidad privada es más ágil a la hora de pedir una cita, aunque últimamente menos". Y es que sostiene que antes el tiempo de espera para las citas era más breve ("ahora la pides y te la dan a veces para cuatro meses") y el cuatro médico era más amplio.
Por ahora solo necesita medicación esporádica. El servicio de receta electrónica incluye los visados, por lo que ya no deberán realizarse en las oficinas de Muface, salvo algunas excepciones. Jiménez Alonso explica que ella ha necesitado hasta ahora visado para la vacuna de la alergia, "pero he decidido parar unos años".
Progresiva expansión
Raquel Martínez García, secretaria general del Consejo General de COF, detalla a este periódico la importancia de esta progresiva expansión de la receta electrónica concertada con Muface: "Hay muchísimo trabajo detrás con la digitalización de la prestación. Parece que la receta electrónica llega y es fácil, pero no".
Tras estas ocho autonomías que ya tienen la receta electrónica concertada con Muface, ¿se conoce cuál será la siguiente? "No hay nada fijo aún, pero nuestro objetivo es que en 2024 consigamos desplegar, si no en todas las comunidades, sí en casi toda la totalidad del territorio nacional", resume. Achaca el retraso a la celebración de elecciones generales en el Gobierno de España y las elecciones al Consejo General de COF: "No podíamos hacer nada hasta tener un escenario político estable".
"No hay incidencias; se nace ya desde la interoperabilidad" (Raquel Martínez, Consejo General de COF)
Martínez García aclara que no se registran incidencias: "Todo funciona con normalidad, porque está ya muy rodado. Al principio tuvimos ajustes, más que incidencias, y los realizamos en Cantabria, la primera comunidad donde pusimos en marcha la receta electrónica concertada con Muface; ajustes que ya subsanamos en aquel piloto". Y matiza que las dispensaciones, al ser la receta interoperable, se pueden recoger en la misma comunidad o en cualquiera de las ocho que ya tenga desplegada la receta: "Se nace desde la interoperabilidad".
"La receta electrónica garantiza esa relación médico-paciente en la que hay una prescripción unipersonal" (Carles Recasens, Colegio de Médicos de Baleares)
Por su parte, Carles Recasens, presidente del Colegio de Médicos de Baleares, subraya que la receta electrónica, en general, tanto pública como privada, aporta seguridad y trazabilidad: "Aparte de la comodidad para el paciente, entraña seguridad. Cuando haces una receta en papel, ese papel se puede extraviar y duplicar. Hoy en día, uno de los problemas que existe con las recetas en papel es que se falsifican, se hacen fotocopias y hay todo un mercado de tráfico de fármacos".
Incide, por ello, en que "la receta electrónica garantiza esa relación médico-paciente en la que hay una prescripción unipersonal. Aquí hay un tema de seguridad y, sobre todo, de trazabilidad. Sabemos quién es el prescriptor, qué es lo que prescribe, a quién y que la farmacia después lo dispensa a esa persona. Es decir, hay un control de lo que prescribe el médico, sobre todo en cantidad, y también es un indicador de la adherencia del paciente al tratamiento. En resumen, para el facultativo es un tema, sobre todo, de seguridad".
"Tanto el Consejo General de Farmacéuticos como la OMC tienen un ejercicio de validación de estas plataformas de prescripción electrónica privadas" (Carles Recasens)
En su consulta recibe a varios pacientes de Muface y, con la llegada de la receta electrónica concertada, ve en ellos un "alivio". Y añade: "Ya se olvidan de tener que ir a Muface a solicitar los talonarios, luego a por la receta (que se la sella el médico), a su validación posterior a mano (como requerían algunos tipos de medicamentos)... Esto acelera y agiliza muchísimo el proceso, porque desaparecen estos pasos".
Recasens matiza que todo es "cuestión de músculo. Y por eso la Seguridad Social ha sido líder con la receta electrónica, aunque luego se han sumado grandes corporaciones sanitarias a nivel privado".
En este sentido, señala que "a nivel privado es costoso, sobre todo si uno se plantea hacerla propia. Hoy en día existen varias plataformas de recetas electrónicas privadas, de las cuales no todas son igual de válidas y, sobre todo, de seguras. En este caso, tanto el Consejo General de Farmacéuticos como la Organización Médica Colegial (OMC) tienen un ejercicio de validación de estas plataformas de prescripción electrónica, para dar garantía de que son seguras, de esa seguridad clínica de los datos".
El día a día para el farmacéutico y el médico
¿Cómo es el funcionamiento para el farmacéutico? "Desde el Consejo General de COF inyectamos el sistema en todos los software de gestión. El farmacéutico, según trabaja habitualmente, pincha el enlace de receta electrónica mutualidad -Muface en este caso- y ya puede dispensar la receta sin ningún problema. No es nada complicado. Intentamos que sea lo más sencillo para las farmacias", explica Martínez García.
"Lo bueno del modelo es que se trata de un concierto nacional, con conexión directa entre el repositorio Sirem, de Muface, y Nodofarma, del Consejo General de COF" (Raquel Martínez García)
La secretaria general del Consejo de COF indica que no supone ningún trabajo añadido para el farmacéutico: "Lo bueno del modelo es que se trata de un concierto nacional, con conexión directa entre el repositorio Sirem, de Muface, y Nodofarma, del Consejo General de COF, lo que hace que todas las farmacias que vayan entrando funcionen con interoperabilidad". Por ello se señala que, en este sentido, tienen ventaja frente a la receta pública, con sus 19 modelos diferentes.
Respecto a los médicos, Recasens puntualiza que ahora están elaborando el sistema de comunicación para los colegiados que hacen medicina privada "para detallarles todos los pasos que deben realizar al hacer estas prescripciones". Eso sí, tienen el sistema electrónico implantado, "ya que el chupinazo ya se ha dado" (fue el pasado 12 de marzo).
"Estamos elaborando una especie de guía para los más de 2.000 médicos de Baleares que hacen medicina privada o mixta" (Carles Recasens)
Es decir, están en fase de "comunicar una documentación por pasos, porque Muface no tiene acceso a los más de 2.000 médicos que hacen medicina privada o mixta en Baleares, sino que esa comunicación la tenemos que hacer nosotros. Es lo que estamos haciendo junto con Muface, con una información sencilla, práctica y visual que no les genere ningún tipo de duda".
Y es que, asegura, en medicina privada coexisten varios sistemas de prescripción "en función de si es de Muface, una receta privada en papel... Rempe es una plataforma con la que queremos llegar a un acuerdo para gestionar la receta electrónica privada en Baleares que no sea de Muface, pero coexisten varias. Por eso queremos elaborar esta guía".
¿En otras mutualidades?
¿Cómo está el panorama en el resto de mutualidades? "En la parte pública ya están los tres conciertos adecuados a receta electrónica", aunque aún falta Mugeju en Castilla y León, según el Ministerio de Sanidad a fecha de 24 de febrero: "Es probable que falte aún, porque recientemente se ha incorporado Isfas, que nos ha costado. Todo va en función del convenio de la mutualidad con la comunidad autónoma", matiza Martínez García.
Tras una consulta de este medio, Mugeju ha comunicado que aproximadamente a principios de 2025 llegará la receta electrónica pública a Castilla y León.
¿Por qué este retraso? "La parte concertada es más compleja. Sé que Isfas está muy interesado en trabajar en la concertada, pero les falta desarrollo tecnológico. Llegará", indica la secretaria general del Consejo de COF.
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