Farmacia Reboreda lleva el nombre del pueblo en el que está ubicada en el municipio gallego de Redondela, provincia de Pontevedra. Abrió sus puertas en 2001, está situada en una vía de mucho tránsito de vehículos -con muy buena parada- y se cambió a la antigua fábrica de fundición de estaño que tenía justo enfrente en enero de este año.
Antes de la mudanza era una botica pequeña que soñaba con servicios y con una atención todavía más personalizada al paciente, pero el espacio se le quedaba justo.
“Desde la farmacia antigua podíamos ver enfrente un edificio que había sido una fundición en su momento y que siempre había formado parte del entorno paisajístico de Reboreda. Y, poco a poco, comenzó a surgir una idea... ¿Qué mejor sitio que ese para iniciar una nueva andadura?”, explican a CF María Soledad González Silva y Clara Hernández González, sus titulares.
Materiales nobles
El nuevo diseño es un espacio diáfano que transmite calidez y paz. “La botica está rodeada de naturaleza y ese mismo estilo ecológico y natural se transmite en el interior del edificio. Los colores empolvados congenian con el ambiente que se respira en la farmacia y el carácter de las que trabajamos aquí”, añaden.
La piedra, el ladrillo, la madera y la vegetación son las notas principales de esta botica rural. “En la reforma se han empleado materiales nobles y amables que convierten el espacio en un lugar que es sinónimo de bienestar, seguridad y salud”, indica Marta Soler, arquitecta de Concep, la empresa que se ha encargado del diseño. También se ha respetado la esencia y carácter industrial de la construcción original, “pero dotándola de la calma, cercanía y calidez que aportan las titulares y su equipo”, añade Luis Miñán, ingeniero de Concep.
Además, se han mantenido las texturas propias de los materiales empleados, conjugándolos con los colores empolvados de su imagen corporativa: rosa y verde menta como predominantes.
“Son colores dulces y serenos, que aportan una imagen fresca pero atemporal con la que se sienten identificadas las titulares. Además, la experiencia de compra es acogedora, bonita y única, en una atmósfera especial que no deja indiferente”, dice Soler.
Dada la situación actual de pandemia, sus titulares creen que es prematuro aventurar resultados, pero reconocen “que las ventas han aumentado considerablemente” tras el cambio de ubicación y reforma. “Nuestra farmacia gusta mucho y se nota en el tique medio”.
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