La parte empresarial, FEFE, y la sindical, formada por la Unión General de Traba-jadores (UGT), CCOO y la Unión de Trabajadores de Farmacia (UTF), tienen que comenzar a fijar reuniones para negociar el XXV Convenio de Oficinas de Farmacia, que tendría que haber comenzado a aplicarse en 2017. El pistoletazo de salida lo ha dado el Tribunal Supremo, con la sentencia dada a conocer el pasado jueves, anulando dicho convenio por falta de representatividad del sindicato firmante, UGT.
Todos esperan llegar a un acuerdo lo más pronto posible. ¿Serán duras las negociaciones? "Aquí siempre lo son, pero una cosa es debatir y discutir con la contraparte y otra es reñir. Ambas partes tendremos que negociar de buena fe", apunta María Victoria Gómez, responsable de Negociación Colectiva de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO (FSS-CCOO).
Salvado este primer escollo de la representatividad sindical ("No ha sido un problema de la patronal", recalca Luis de Palacio, presidente de FEFE), ahora falta ponerse de acuerdo en los temas principales que afectan a los trabajadores de las más de 22.000 oficinas de farmacia, sobre todo los relativos a la jornada laboral y a los salarios.
Puntos discordantes ante un nuevo convenio
-1. Horas laborales. FEFE apuesta por aumentar las horas laborales hasta acercarse a las 40 horas laborales semanales del Estatuto de los Trabajadores y cubrir el horario obligatorio mínimo. El XXIV Convenio fijaba 1.783 horas anuales para el año 2016 (equivaldrían a unas 38 horas semanales), y el XXV, 1.790. Los sindicatos lo desaprueban. El artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores establece que la duración máxima de la jornada ordinaria de trabajo será de cuarenta horas semanales de trabajo efectivo de promedio en cómputo anual. Luis de Palacio, presidente de FEFE, explicó hace apenas un mes a este medio que “No es una diferencia insalvable”.
¿Por qué propone la empresarial aumentar la jornada laboral? “Porque no somos capaces de cubrir el horario mínimo obligatorio", sostiene De Palacio. "Lo tenemos medido, y las 1.790 horas es un poquito menos de lo que dice el Estatuto de los Trabajadores (40 horas semanales), pero se acerca mucho”, señala. Y añade que "en muchas farmacias de España quien más trabaja es el farmacéutico titular. El colaborador tiene que hacer las mismas horas mínimas". Por el contrario, los sindicatos argumentan que existe la opción de que el farmacéutico titular contrate a más trabajadores.
-2. Días laborables. Tanto el XXIV como el XXV Convenio establecen que todos los días del año son laborables, algo que los sindicatos tampoco aprueban. FEFE admite que esto es contradictorio, porque las tablas salariales especifican horas extraordinarias por festivos y piensan que habría que acordar los mínimos del sector.
-3. Salarios. La parte sindical se queja de la supresión de la paga extra de beneficios, ausente ya del XXIV Convenio, a lo que FEFE replica que se quitó a cambio de prorratearla. Los sindicatos piden también que no se bajen más los salarios, con la perspectiva este año de su congelación, y que se reconozca la antigüedad.
-4. Conciliación. Aparte de que los sindicatos denuncian jornadas de guardia que pueden llegar hasta las 12 horas, también se quejan de la rotación de los turnos (de mañana, de tarde, partido...), una traba para llevar a cabo la conciliación. Sin embargo, FEFE aclara que esto va en función de los contratos que firmen las farmacias.
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Larga batalla judicial
El XXV Convenio ha supuesto una larga batalla judicial que concluyó (eso esperan todos) el pasado jueves, cuando se conoció el fallo del Tribunal Supremo anulando dicho convenio. Todo data de la constitución de la mesa negociadora el 4 de julio de 2016, mesa que CCOO impugnó en enero de 2017 ante la Dirección General de Trabajo. Una semana antes el texto había sido suscrito por la UGT, FEFE y Fenofar, ya integrada en FEFE.
El XXV Convenio surgió del bloqueo del anterior por una falta de acuerdo en la interpretación de las subidas salariales acordadas y nació con un contencioso sobre la representación sindical entre UTF y CCOO de un lado y UGT de otro. CCOO y UGT reclamaban tener mayoría sindical y CCOO se retiró de la mesa.
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