Son tres farmacéuticas de Santa Coloma de Gramanet, Barcelona. Se llaman Montse Iracehta, Pilar Bladé y Laura Gomá. Han salido de detrás del mostrador de sus boticas para colarse en las aulas de varios colegios de la localidad para hablar de virus y bacterias y, como no, del coronavirus, a niños de tercero, cuarto, quinto y sexto de Educación Primaria.
Cumpliendo con todas las medidas de seguridad que impone la pandemia, durante una hora las tres farmacéuticas explican a los chavales las diferencias entre virus y bacterias, qué son los antibióticos, para qué sirven las vacunas, qué es el coronavirus y cómo se trata, y les enseñan en un taller práctico cómo se tienen que lavar las manos, un sencillo gesto que hoy es más importante que nunca para prevenir contagios de la covid-19.
De aquí a mayo tienen programadas trece charlas que van a impartir en seis colegios y, si la experiencia funciona, se podría hacer extensible al año que viene con más sesiones y en más centros.
Montse Iracheta explica a CF que esta iniciativa parte del Ayuntamiento de Santa Coloma, que desde hace años cuenta con un Programa de Actividades Educativas (PAE), en el que distintos profesionales imparten charlas a los colegios. "Hay distintos apartados, uno es sobre reciclaje, otro sobre lectura y otro sobre salud, en el que están inscritos distintos profesionales sanitarios, entre ellos los farmacéuticos", concreta Iracheta.
La aceptación por parte de los niños no puede ser mejor, según Iracheta. "Están muy receptivos a lo que les explicamos y están muy bien educados, hay mucho respeto por el turno de palabra y escuchan en silencio", celebra la farmacéutica. Además, ensalzan la labor que están haciendo los docentes, pues los alumnos tienen muy asumidas las medidas de higiene y prevención de contagios.
Conceptos sencillos y amenos
Para lograr captar su atención, las ponentes utilizan un contenido muy sencillo que obtienen de material que ya tiene elaborado el COF de Barcelona y se utilizan definiciones realizadas por sociedades científicas como la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (Sefac) y la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (Camfyc). Incluso en sus intervenciones les acompaña un famoso pulpo de peluche, muy popular entre los escolares, que tiene una cara reversible, en la que por un lado muestra enfado y por otra, alegría. Además, hacen sopas de letras donde tienen que encontrar palabras relacionadas con la pandemia.
En sus ponencias, los símiles son una constante para que los chicos entiendan conceptos tan complejos como los anticuerpos. "Les decimos que son un ejército que tiene el organismo para defenderse del enemigo", comenta la farmacéutica, a quién le llamó mucho la atención cuando un niño le preguntó: "¿Y siempre gana ese ejército?".
"Tras la explicación, hacemos un debate -continúa Iracheta- y les preguntamos si algún familiar ha sido vacunado, si tienen miedo del coronavirus... Son muy participativos porque nos cuentan, además, si han tenido algún familiar enfermo y nos preguntan cuándo terminará todo, refiriéndose a la pandemia".
En las visitas a los colegios, las farmacéuticas no desaprovechan la oportunidad de transmitir a los alumnos de primaria cuál es la labor del farmacéutico, qué tipo de medicamentos hay, las distintas vías de administración...
Trabajo remunerado
Esta labor de educación sanitaria la llevan a cabo a las 9.00 de la mañana, cuando la farmacia no ha abierto aún, o a las 15.00, cuando hay menos afluencia; de esta forma, pueden compaginar ambas tareas.
Y por el esfuerzo y la dedicación, estas farmacéuticas reciben 30 euros por charla, un coste que asume el ayuntamiento. "El precio lo pusimos nosotras y es algo simbólico -aclara Iracheta-. Con este trabajo demostramos la labor que puede desempeñar el farmacéutico en el ámbito de la salud pública y que los farmacéuticos podemos salir de nuestras farmacias y colaborar con las autoridades".
Charlas con solera
El trabajo fuera de la botica que están desempeñando Iracheta, Bladé y Gomá sigue la estela del que comenzaron hacen años los farmacéuticos que han participado en el Programa de Educación Sanitaria en el Buen Uso de los Medicamentos (Pesbum), fruto de la colaboración entre el Consejo de COF de Cataluña y el CatSalut.
Como informa el COF de Barcelona a este medio, en este programa el farmacéutico imparte las charlas en formato taller en los equipamientos de las entidades y organizaciones que lo pidan, como pueden ser bibliotecas, locales comunitarios municipales, casales de las personas mayores, centros cívicos, centros de Atención Primaria o en la misma farmacia.
Los temas en los que se centran son: antibióticos, dolor, diabetes, hipercolesterolemia, hipertensión arterial, insomnio e incontinencia urinaria. "A su vez, ofrece dos sesiones sobre salud bucodental y un ciclo de dos charlas: una primera con conceptos básicos sobre el buen uso de los medicamentos y una segunda sesión en formato taller sobre la importancia de seguir bien los tratamientos”, detalla el COF.
Según datos facilitados por la entidad colegial, en 2019 se realizaron 90 sesiones en 31 poblaciones de Barcelona, a las cuales asistieron 1.305 personas. Las cifras fueron algo inferiores en 2020, como es lógico, por la pandemia. Así, se celebraron 42 sesiones impartidas por 24 farmacéuticos y consiguieron una asistencia de 483 personas. "Si hasta ahora las charlas se han celebrado de forma física en centros cívicos, ayuntamientos, bibliotecas y otros espacios, en la edición 2021 y debido a la situación de la pandemia, también se ofrecerán en formato virtual, e independientemente del formato, las sesiones no tienen coste para los participantes", aclara el COF. Otra novedad de este año es que se ha añadido un tema nuevo ligado a la pandemia y que se centra en las vacunas frente a la covid-19.
En declaraciones a CF, Pilar Rius, secretaria técnica del Consejo de COF de Cataluña, recuerda que el Programa de Educación Sanitaria a las Personas Mayores (actualmente, Pesbum) "tiene sus inicios en 2006 de la mano de la Asociación de Farmacéuticos Rurales de Cataluña (Afruc) en municipios de Tarragona y Lleida, con la colaboración de los COF y el Departamento de Salud catalán. Más adelante, en 2009, se incorporaban los COF de Girona y Barcelona".
Y añade que, a partir de 2014, el programa quedó adscrito al Servicio Catalán de Salud en coordinación con el Consejo de COF de Cataluña. "De 2014 a 2018, se ofrecieron 1.476 sesiones de hasta siete temáticas diferentes, que contaron con un total de 26.621 asistentes".
Rius destaca que, gracias a los buenos resultados obtenidos, y, con el objetivo de asegurar la continuidad del programa y ampliarlo a otros colectivos, además de la gente mayor, tanto el CatSalut como el Consejo de COF de Cataluña coincidieron en la necesidad de enmarcarlo en el Concierto de Atención Farmacéutica. "Así, finalmente, el 18 de diciembre de 2019 se firmó el convenio que lo incorporaba al Concierto, de forma que el programa pasa nombrarse Programa de educación sanitaria sobre el buen uso de los medicamentos (Pesbum)".
En su opinión y, en la línea de lo que también postula Iracheta, "con los años de vida de este programa se ha demostrado que el farmacéutico comunitario es el profesional sanitario idóneo para conseguir implantar programas de gran cobertura poblacional. El Pesbum también ha fomentado la participación del farmacéutico comunitario en otros programas, como, por ejemplo, la Universidad de la gente mayor y en programas sociales, entre otros, creando sinergias positivas que ponen en valor el rol profesional y los programas en sí". Asimismo, cree que la coordinación de este tipo de programas entre las administraciones públicas y los colegios profesionales "constituyen una herramienta fundamental para el éxito de estas actuaciones".
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/3ufWfJE
No hay comentarios:
Publicar un comentario