La Reumatología es una de las muchas especialidades en las que la telemedicina se ha abierto paso con la pandemia, pero muchas veces el seguimiento telefónico no es suficiente para el correcto control de una enfermedad. La reumatóloga del Hospital de Igualada Isabel Morales ha desarrollado una aplicación móvil que están utilizando farmacias de la provincia de Barcelona para medir el grado de inflamación de pacientes con artritis reumatoide. La información objetiva recogida por el farmacéutico se suministra al paciente, que es quien se la traslada al reumatólogo para proceder al ajuste del tratamiento.
Para desarrollar esta tecnología Morales ha liderado un estudio clínico con termografía, cuyos resultados se han presentado en diversas comunicaciones en congresos nacionales e internacionales de Reumatología. El último, la II Diada Reumatológica Digital, organizada por la Sociedad Catalana de Reumatología y la Fundación Academia de Ciencias Médicas y de la Salud de Baleares, celebrada el pasado 9 de abril. Próximamente se presentará en una comunicación oral en el Congreso Europeo de Reumatología (Eular 2021) en junio.
El desarrollo de la aplicación, que según su creadora es la primera app que utiliza termografía e inteligencia artificial en Reumatología, dio lugar en 2019 a la compañía Singularity Biomed, de la que Morales es cofundadora junto con el experto en Bioinformática Manuel Marín. “RheumaTest evalúa de forma rápida, automática e innocua la inflamación de las articulaciones de las manos en pacientes con artritis reumatoide, gracias a la fotografía térmica y su análisis a través de inteligencia artificial”, explica Morales.
La artritis reumatoide es una enfermedad crónica que afecta en España aproximadamente a 300.000 personas y se caracteriza por producir inflamación en las articulaciones, entre ellas de las manos. “La inflamación ocasiona aumento de temperatura, así que se me ocurrió que el análisis de las fotografías térmicas de las manos mediante inteligencia artificial podría servir para evaluar la inflamación de manera precisa y automática”, expone. Aunque de momento se aplica en artritis reumatoide, entiende que podría utilizarse para detectar de inflamación de las articulaciones de las manos en otras enfermedades como artritis microcistalinas, lupus eritematoso sistémico o espondiloartritis.
Morales recuerda que la enfermedad cursa con brotes y que el seguimiento del reumatólogo es esencial para detectar la presencia de inflamación y ajustar el tratamiento con el objetivo de evitar el dolor y la discapacidad a largo plazo. “En las visitas telefónicas se suele extrapolar la actividad de la enfermedad a partir de los síntomas expresados por el paciente. RheumaTest aporta información objetiva sobre la inflamación de las articulaciones, lo que mejora el seguimiento a distancia de los pacientes con artritis reumatoide”.
Sus creadores entienden que la crisis sanitaria es un espaldarazo a este tipo de tecnologías, que aportan datos útiles sobre la enfermedad sin que el paciente tenga que acudir al hospital o a un centro de salud. La reumatóloga sostiene que las farmacias son “el lugar idóneo” para realizar la prueba. En primer lugar porque la realiza un profesional sanitario, y además porque es el establecimiento al que los pacientes acuden de forma regular en busca de su medicación, con lo que se evitan desplazamientos innecesarios.
¿Cómo se lleva a cabo? El farmacéutico pregunta al paciente qué grado de dolor ha tenido en la última semana y le realiza una fotografía térmica de las manos. El resultado se anota en una tarjeta, similar a la utilizada para control de la tensión arterial, y el paciente comunica el resultado al reumatólogo en la próxima visita. El proceso lleva menos de un minuto y aconsejan practicar la prueba una vez al mes.
La reumatóloga señala que en estos momentos prefiere “no concretar el número de farmacias adheridas, porque es un proceso dinámico y estamos en crecimiento”, pero son “varias de la provincia de Barcelona”. Afirma que trabajan dando a conocer la aplicación al reumatólogo, y posteriormente buscan farmacias en la zona en la que los pacientes puedan hacerse la prueba.
Una de estas farmacias es la de Genar Esteve en Igualada. El farmacéutico señala que su apuesta se inscribe en su filosofía de proveer “una atención asistencial de calidad y profesional”. Esteve destaca que “al usarse la app mejora mucha la comunicación entre el paciente, la farmacia y el médico, a la vez que genera una gran adherencia al tratamiento por parte del usuario”.
Para Esteve, invertir en esta tecnología supone “posicionarnos como referentes en un proyecto singular y pionero en el mundo asistencial, en este caso en el ámbito de la Reumatología”.
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