Estos días se han detectado nuevas mascarillas defectuosas en Madrid y Andalucía, que nada tienen que ver con las Garry Galaxy (N95) en envoltorio verde.
En Madrid se trata del Modelo KN95 MasK, en el que se habla de lotes que no cumplen las especificaciones requeridas para ser utilizadas, y del Modelo Purvigor N99, en el que algunos lotes tampoco serían aptos para su uso, explican desde Satse Madrid.
El sindicato enfermero ha tenido conocimiento de un estudio del Hospital 12 de Octubre que pone en entredicho la fiabilidad de estas mascarillas. También duda de que hayan pasado los controles pertinentes.
“No es posible que sigan ocurriendo situaciones tan graves como esta”, afirman desde el Satse Madrid, que exige que antes de distribuirse cualquier material de protección sea testado por los organismos pertinentes”.
Recuerda, además, que los sanitarios que utilizaron las Garry Galaxy (N95) en envoltorio verde no se han tomado las medidas suficientes en cuanto a aislamiento y tests para saber si se había producido infección por la Covid-19 entre los profesionales que las habían usado.
Dos modelos en Andalucía
Por su parte, Satse Andalucía ha pedido que se ponga en aislamiento preventivo a todos aquellos sanitarios que hayan utilizado los dos modelos de mascarillas, que se han utilizado para técnicas de alto riesgo al ser FPP3, así como depurar responsabilidades tras la retirada de los dos nuevos modelos de mascarillas defectuosas: Elite Respitator Eb09.049 y KN95 Mask (Purvigor).
De hecho, se ha procedido a retirarlas ante la falta de evidencias que garantice su efectividad. “Desconocemos si la adquisición de estas mascarillas corresponde al Ministerio de Sanidad o al propio SAS, pero se trata del tercer caso de material defectuoso en apenas diez días, tras el caso de la retirada de las mascarillas FFP2 del fabricante Garry Galaxy distribuidas por el Ministerio de Sanidad”, dicen desde Satse Andalucía.
El sindicato enfermero asegura que tiene evidencias de que estos nuevos modelos de mascarillas defectuosos se han estado utilizando, al menos, en centros del SAS en la provincia de Cádiz y Huelva y de la Agencia Pública Sanitaria Alto Guadalquivir en Jaén, pero sospecha que han sido distribuidas en centros sanitarios de toda Andalucía.
No renovación de contratos en Madrid
Stase Madrid también denuncia que siguen produciéndose no renovaciones de contratos entre el personal contratado para la Covid-19.
“Muchos de ellos tenían contratos hasta finales de mayo o junio y, sin embargo, ven cómo se están rescindiendo. Los que lo tenían hasta el 30 de abril ya han recibido la comunicación de que no van a ser renovados a pesar de que la pandemia sigue y la necesidad de contar con suficientes profesionales, especialmente de Enfermería, sigue siendo acuciante”.
Señala que en la segunda fase de la pandemia serán los centros de salud los encargados de liderarla y si las plantillas son escasas es imposible que se pueda hacer con las garantías suficientes.
“En los últimos meses se suspendieron permisos, vacaciones,… y otros muchos derechos de los trabajadores que en esta fase deben reactivarse ¿De dónde sacarán el personal suficiente para sustituir a estas enfermeras que disfruten de sus derechos? ¿Volveremos a tener plantillas infradotadas?, ¿Cuándo y con quien se devolverá el exceso de jornada? ¿Cómo podrán disfrutar sus vacaciones?, ¿Cómo se afrontará la reducción de lista de espera si no se mantienen las plantillas actuales?”, se preguntan desde el sindicato.
Satse exige que los EPI sean testados antes de su distribución para evitar riesgos entre los sanitarios, y que los profesionales que hayan utilizado estas mascarillas sean puestos en aislamiento preventivo. coronavirus Off Redacción Profesión Offvia Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/2y0iJXu
No hay comentarios:
Publicar un comentario