Colaborativo y multidisciplinar. Con estas dos palabras Mario García Gil, jefe del Servicio Farmacia del Hospital Universitario de Fuenlabrada (Madrid), define Fuencovid, una gran base de datos en la que están trabajando hasta 102 profesionales sanitarios del centro, volcados en alimentar esta plataforma, que aspira a convertirse en un instrumento para la mejora de la práctica asistencial, la toma de decisiones, y un impulso a la investigación en el campo de la covid-19.
Como explica a CF García Gil, esta iniciativa surgió en marzo-abril, al comienzo de la crisis sanitaria, tras detectar la necesidad de realizar y actualizar los protocolos clínicos, que van variando en función de las distintas olas de la pandemia y del conocimiento que se va teniendo de la enfermedad.
Así, se decidió registrar los datos más relevantes, hasta 712 variables, de los pacientes con covid-19, tanto adultos como niños, que hayan estado ingresados o hayan pasado por Urgencias del hospital, aunque luego se hayan ido a casa. "La idea era tener una foto detallada de lo que les iba pasando a nuestros pacientes, incluso los que fallecían", resalta. En total hay registrados datos de unos 7.500 pacientes, cada uno con 712 ítems (medicamentos, analíticas, pruebas de imagen, saturación de oxígenos, si ha necesitado ventilación mecánica, etc.) y tienen 9.000 visitas, "lo que supone que algún paciente ha ido alguna vez más", aclara.
Este trabajo es colaborativo porque se lleva a cabo con la implicación de otros diversos servicios del hospital, además del de Farmacia, entre ellos, el de Medicina Interna, Urgencias, UCI, Pediatría, Laboratorio y Rayos.
García Gil no se olvida del Departamento de Sistemas de Información, que es el responsable de la coordinación tecnológica, ni del socio tecnológico del hospital, que es la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Telecomunicación de la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid). Esta colaboración permite que el centro cuente con un ingeniero para dar soporte y desarrollar la plataforma.
El germen está en 'Redfar'
El jefe de Farmacia del Hospital de Fuenlabrada recuerda a este medio que ellos ya cuenta con la historia clínica electrónica, Selene, que recoge datos estructurados de los pacientes, pero hay otros muchos, como las notas médicas, farmacéuticas o de enfermería, "que es lenguaje natural, y que no están estructuradas" y que se tienen que picar a mano. Como especifica García Gil, "solo el 30-40% de los datos de los pacientes están estructurados en historia clínica electrónica, el resto, no".
Por tanto, inspirados en el proyecto Redfar (Registro Español de Resultados de Farmacoterapia frente a covid-19), de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), el Servicio de Farmacia del hospital madrileño propuso crear su propia plataforma y lo bautizaron como Fuencovid, que engloba todo, tanto datos estructurados como los no estructurados.
Para ello, la primera necesidad que tenían era contar con un único cuaderno electrónico de recogida de datos, de los no estructurados, y se sirvieron de los que ya tenía Redfar, que es Redcap, para lo cual hablaron con la SEFH para obtener las licencias correspondientes y poder ser usado por los 102 médicos y farmacéuticos implicados en Fuencovid. Gracias a este cuaderno, se están introduciendo datos clínicos, analíticos, de imagen y terapéuticos que no están en Selene, por ejemplo, "si en una placa realizada el paciente se ve si tiene neumonía bilateral o si la respuesta al tratamiento era completa", concreta el farmacéutico especialista.
Cultura de la ciencia de datos
"El objetivo es buscar una plataforma con un software libre, donde se pudieran recoger todos los datos almacenados o bien en Redcap o bien en la historia. Y como cada ítem de las 712 variables tiene una terminología, la idea es que puedan viajar a esa plataforma, donde quedan guardados de forma ordenada. Esto permite que se puedan hacer preguntas diversas a la plataforma", resume García Gil.
¿Y qué se puede preguntar? Por ejemplo, dentro de un año, puede ser interesante preguntar qué porcentaje de pacientes covid han desarrollado en esos meses un tumor y si ese porcentaje es significativo o no, plantea el experto. "En definitiva, lo que estamos fomentando es la cultura del big data, del machine learning, ciencia de datos", añade.
Por tanto, para el experto, Fuencovid tiene una trascendencia mayor, puesto que es un motor de transformación cultural enfocada en la ciencia de dato y en el cambio de sistemas y procesos". Así, se persigue que en un futuro se amplíe la introducción de datos de otro tipo de pacientes, "por ejemplo aquellos que tengan cardiopatías, y ya hablaremos de nuevas plataformas, con nuevos formularios, y que toda la información viaje a esa plataforma sin tener que picar datos".
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