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viernes, 10 de julio de 2020

Enfermeros advierten: es prioritario subsanar el retraso en el calendario vacunal para evitar brotes de otras enfermedades

Profesión
aliciaserrano
Vie, 10/07/2020 - 12:46
Prevención
La pandemia por Covid-19 ha favorecido el descenso en el cumplimiento del calendario vacunal habitual.
La pandemia por Covid-19 ha favorecido el descenso en el cumplimiento del calendario vacunal habitual.

Las coberturas vacunales han descendido durante los meses de confinamiento provocado por la crisis sanitaria del coronavirus. Por este motivo, los profesionales de enfermería recomiendan ahora iniciar cuanto antes una captación completa en todas las edades, sobre todo en los menores de 15 meses y personas de riesgo.

“La enfermera tiene plenas competencias en materia de prevención y promoción de la salud, y su trabajo en colaboración con el médico en el ámbito de la AP es fundamental para mejorar la cobertura vacunal en el adulto, especialmente la vacunación antineumocócica, cuya cobertura en personas mayores de 65 años en muchas autonomías es muy baja (menos del 25%), lo que implica un riesgo innecesario y muchos procesos neumocócicos en esta población que podrían evitarse”, explica a este periódico Luis Miguel Alonso Suárez, presidente de la Asociación Española de Enfermería y Salud (AEES).

Miguel Alonso Suárez, presidente de AEES.
Miguel Alonso Suárez, presidente de AEES.

Añade que la escasez de recursos, incluida la necesidad de más profesionales que puedan dedicarse a la búsqueda activa, la prevención y la promoción, “pone de nuevo en riesgo a nuestra población mayor”.

Si bien han existido instrucciones que señalaban los procesos vacunales que deberían considerarse prioritarios o urgentes con independencia del estado de alarma sanitaria, “lo cierto es que, en la práctica durante el confinamiento, se suspendieron casi todas las actividades ambulatorias, incluidas las consultas de vacunación, salvo excepciones”, recuerda.

En su opinión, ello  implica un retraso en los calendarios vacunales que se debe subsanar y que no debería repetirse. “Reducir inmunidad ante determinadas patologías infecciosas siempre supone un riesgo de que podamos encontrarnos en cualquier momento brotes de dichas enfermedades”.

Centros de salud cerrados

Para el presidente de la AEES, que todavía hay centros de salud cerrados es "un signo más del caos y desorganización que la crisis sanitaria ha producido en el sistema".

Dice que le consta que en estos momentos se está programando la recuperación de la actividad de manera gradual.

"En estas circunstancias el paciente tiene muy pocas opciones y siempre es el gran perjudicado. Partiendo de que hay diecisiete derechos diferentes a la salud en nuestro país, la variabilidad en los territorios es grande, podemos encontrarnos con que en una región la combinación de asistencia telefónica y presencial funcionan aceptablemente, mientras en otra los pacientes se sienten abandonados y solo acudiendo a urgencias reciben la atención necesaria”.

Redefinir la AP

La solución para Alonso Suárez está en redefinir la atención primaria, ya que hoy en día más de la mitad de las camas hospitalarias se dedican a pacientes crónicos, pluripatológicos, de edad muy avanzada, que en un amplio porcentaje podrían ser atendidos en su propio domicilio.

"Proponemos que los hospitales vuelvan a su naturaleza, al proceso quirúrgico y al paciente agudo (de verdad). Refundar la AP en la que además de la asistencia habitual se desarrolle un programa de Atención Domiciliaria capaz de dar respuesta a las necesidades de nuestra población, incluido el debate sobre las residencias de mayores".

También dice que es fundamental la gestión de casos y la alta resolución; pleno desarrollo de la prevención y promoción de la salud; implantación en todos los centros educativos de la enfermería escolar como eje fundamental en la generación de hábitos saludables en la infancia y juventud.

"En nuestra propuesta la figura de la enfermera es fundamental, siempre trabajando en equipo con el resto de los profesionales”.

Tras el descenso de las vacunaciones en los meses de marzo y abril, la prioridad es revisar el estado de vacunación de la población

Recuerda, además, que durante la crisis pandémica no se ha tenido en cuenta en ningún nivel de decisión al colectivo de enfermería.

“Las enfermeras somos mayoritariamente asistenciales, pero también somos docentes, gestoras, investigadoras… algo que se ha obviado sistemáticamente”.

Vacunas, incluso confinados

Desde Enfermería y Salud creen que es posible mantener los proyectos de prevención y promoción de la salud, como es el caso de la vacunación de los mayores y de los grupos de riesgo, incluso en una situación de confinamiento.

“Se trata de protocolizar las actuaciones y de conocer adecuadamente el uso de las medidas de seguridad, tanto para el profesional, como para el ciudadano. Obviamente implica la necesidad de contar con los recursos necesarios, lo que no debería ser un obstáculo”, dice su presidente.

También reflexiona sobre  el alto número de profesionales sanitarios contagiados por la Covid-19 en España. “El propio profesional se ha convertido en un vector de contagio. Algo sobre lo que tendremos que reflexionar para que no vuelva a suceder”.

¿En casa del herrero, vacuna de palo?

El personal sanitario es por definición grupo de riesgo en muchos procesos infecciosos, como la hepatitis B, A, etc.

“Prácticamente en casi todas las patologías inmunoprevenibles la tasa de vacunación es casi del 100%, aunque siempre hemos tenido problemas con la vacuna de la gripe, cuyas tasas de cobertura son mucho más bajas de lo que sería adecuado”, explica Alonso Suárez.

Si bien es cierto -añade- que en los últimos años se han mejorado dichas tasas. “Eperamos que como consecuencia de la pandemia consigamos este otoño un récord histórico en la vacunación de la gripe en los profesionales sanitarios”.

Vacunación infantil

Para la enfermera y presidenta de la Asociación Canaria de Enfermeros en Vacunología (Acevac), Begoña Reyero, “debemos vacunar tanto a niños pequeños (menores de 15 meses), como a adolescentes, adultos, personas mayores o de riesgo, si tenemos la oportunidad”.

Así lo señaló en el contexto de las III Jornadas de la Acevac, que se celebraron hace unos día de manera virtual bajo el lema Una mirada global al mundo de la vacunación con la colaboración de Pfizer.

La primera sesión se centró en la enfermedad meningocócica y en las estrategias de vacunación disponibles en la actualidad, poniendo énfasis en que en esta situación, tras el confinamiento, se pueden administrar las vacunas sistemáticas junto con las recomendadas para minimizar las visitas por parte de los niños al centro de salud. 

La Asociación Canaria de Enfermeros en Vacunología puso de relieve el importante rol de la enfermera a la hora de vacunar y evitar que resurjan enfermedades

Reyero también mencionó al colectivo de los adolescentes, ya que se trata de un grupo de población en el que las tasas de vacunación son más bajas de lo deseable a pesar de que deben recibir diferentes vacunas como la del tétanos-difteria, la vacuna del virus del papiloma humano (VPH) o la vacuna tetravalente frente al meningococo, que protege frente a los serogrupos A, C, W e Y.

“Es importante incidir en este colectivo, no solo para inmunizarles, sino porque en el caso de la enfermedad meningocócica, además, los adolescentes son los mayores transmisores de esta patología”, apuntó Reyero.

También explicó que el consejo vacunal no debe centrarse únicamente en lo señalado en los calendarios vacunales, “sino que debemos tener también en cuenta las vacunas que tenemos a nuestra disposición”, ha reconocido la presidenta de Acevac.

Enfermería, fundamental en la vacunación

Los enfermeros cántabros también se han mostrado comprometidos con volver a la normalidad y recuperar las coberturas de vacunación infantil de antes de la crisis sanitaria.

Así se puso hace unos días de manifiesto en el webinar Cómo adaptar el calendario infantil ante la Covid-19, organizado por la Asociación Cántabra de Enfermería Pediátrica (ACEP).

“La vacunación entre los niños mayores de 3 años se ha retrasado durante la crisis de la Covid-19”, indicó Raúl Ayala, enfermero del Centro de Salud Sardinero en Santander.

Durante el encuentro on line también se destacóel trabajo llevado a cabo por los profesionales sanitarios para garantizar el cumplimiento del calendario de vacunación infantil durante la pandemia.

“Hemos agrupado las vacunas en el menor número de visitas con el objetivo de que las familias tuvieran que acudir menos veces al centro de salud”, dijo Ayala, que explicó que entre lactantes de hasta 15 meses no se ha reducido la vacunación.

Por su parte, Reyero puso en valor el importante papel del profesional sanitario a la hora de promover la vacunación en todos los colectivos, y muy especialmente el rol que tiene el profesional de enfermería.

“Las enfermeras somos las que vacunamos; por eso queremos insistir en que se debe activar la vacunación en todas las edades tras la crisis generada por la Covid-19 para que no vuelvan a aparecer patologías que ya estaban controladas como el sarampión”, ha afirmado.

Ayala también recordó que la posición de estos profesionales sanitarios es la de informar a los padres que acuden con su lactante a la consulta, darles a conocer las pautas de vacunación.

“Los enfermeros somos los que realizamos el acto vacunal, por tanto, nuestro papel es fundamental, no solo materializando el acto, sino informando y recomendando a las familias que la mejor medida preventiva es la vacunación”.

Tras el descenso de la vacunación en los meses de marzo y abril, la prioridad es retomar la actividad para evitar que se reduzca la inmunidad ante determinadas patologías infecciosas, según la Asociación Española de Enfermería y Salud (AEES). coronavirus Off Alicia Serrano Profesión Off

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