La Agencia Española de Seguridad Alimentaria (Aesan) ha publicado nuevo material informativo sobre los complementos alimenticios, con el fin de ayudar a los consumidores a entender mejor qué son y como consumirlos de manera segura.
En esta documentación, accesible desde su web, se da información detallada sobre distintos aspectos de los complementos alimenticios, como su regulación en España, los mensajes que puedo encontrar en ellos, si existen riesgos asociados a su consumo o la información que tiene que aparecer necesariamente en el etiquetado.
"Una dieta completa, variada y equilibrada proporciona todos los nutrientes necesarios para el normal desarrollo y mantenimiento de un organismo sano. Los complementos alimenticios son alimentos que por definición sirven para complementar la dieta normal. En ocasiones, tomar complementos nos puede ayudar para mantener nuestra salud, pero nunca debemos olvidar que no sirven para curar ni tratar enfermedades", dice la agencia.
La Aesan, en este material informativo, hace hincapié en lo que se debe hacer antes de tomar un complemento alimenticio, y es valorar si realmente se necesitan y anima a la población a consultar con un profesional sanitario, especialmente si hay alguna enfermedad de base, si se está tomando alguna medicación, si se está embarazada o si es para un niño. También destaca a la farmacia como un canal de distribución seguro, y al farmacéutico como una fuente de información fiable, a la que se debe acudir para obtener una buena información y resolver cualquier duda y no acudir a "contenido publicitario en forma de artículos, reportajes o consejos de personas influyentes”.
Comprobaciones antes de tomarlos
También aconseja hacer dos comprobaciones antes de tomar un complemento alimenticio. La primera es ver si está notificado en la base de datos de la Aesan y para ello pone a disposición de quien lo desee usar un buscador de complementos disponible en su web. La segunda es ver si las declaraciones de salud que hace de ese complemento la empresa que lo desarrolla son legales. Para ello, hay otro buscador de la Aesan específicos de alegaciones.
Precisamente sobre las alegaciones advierte de que estos productos "no puede incluir ninguna afirmación que sugiera que una dieta equilibrada y variada no aporta por sí misma las cantidades adecuadas de nutrientes en general". Además, no se les puede atribuir "la propiedad de prevenir, tratar o curar una enfermedad ni se referirá en absoluto a dichas propiedades". En el caso de las ayudas para el control del peso, la Aesan recuerda que "solo tienen sentido con un estilo de vida saludable" y en el caso del rendimiento deportivo, insiste que se mejora "con un entrenamiento adecuado y una dieta saludable". Y hace otra advertencia: "Ningún complemento alimenticio es útil en las relaciones sexuales".
Riesgos para la salud
Otro aspecto que trata la Aesan son los posibles efectos en la salud derivados de un consumo inadecuado: "Un consumo excesivo, o que no respete las instrucciones de uso, puede presentar riesgos para la salud, particularmente, en personas con algunas enfermedades o por su combinación con medicamentos. Un producto natural no es sinónimo de un producto seguro. Muchas especies vegetales contienen sustancias activas que pueden no ser seguras para algunas personas o si se consumen en altas cantidades, como puede suceder con determinados extractos concentrados".
El documento elaborado por la agencia concluye con los datos que se deben contemplar en el etiquetado, como denominación, modo de empleo, dosis, fecha de caducidad, denominación de nutrientes y sustancias, lote, condiciones de conservación, nombre o razón social, lista de ingredientes y advertencias.
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