La alta afectación de la enfermedad dentro del colectivo enfermero ya tiene su reflejo autonómico. Los profesionales de enfermería de Madrid, con un 47% de enfermeros afectados por el coronavirus de origen chino; Castilla-La Mancha, con un 41%, y Cataluña, con un 38%, son los que más han sufrido las inclemencias de la Covid-19 durante esta crisis de salud pública sin precedentes, según un estudio elaborado por Satse tras realizar una encuesta -a finales de mayo y principios de junio- a un total de 8.218 enfermeras de España sobre su situación y condiciones de trabajo en la actual crisis sanitaria de la Covid-19.
Estas autonomías son las que han sufrido con más virulencia las embestidas de este virus de origen chino, tanto en número de contagios como de fallecidos, aunque le siguen de cerca La Rioja (32%), y País Vasco y Castilla y León, con un 27% de enfermeros infectados por el coronavirus.
Las comunidades menos afectadas han sido Murcia y Asturias, ambas con un 13% de los enfermeros afectados. También han sido de las autonomías con menos muertes y contagios.
Las consejerías tienen un suspenso por su gestión
La falta de material y equipos de protección individual (EPI) y las graves consecuencias que la lucha contra la enfermedad ha supuesto a nivel personal para los profesionales de enfermería, también han quedado registradas en cifras en este estudio nacional.
De hecho, la encuesta pregunta a las enfermeras sobre la gestión realizada por su consejería de Sanidad a la hora de solucionar sus problemas durante la crisis sanitaria y las 17 consejerías suspenden.
Los profesionales de enfermería de Extremadura dan a la gestión de José María Vergeles una nota media de 2,4 sobre 10. Le siguen Aragón con un 2,5, y Castilla-La Mancha y Madrid con un 2,6 sobre 10.
La gestión de la Consejería de Sanidad de Asturias es la única que suspende por los pelos, con un 4,7 sobre 10.
Denuncias y quejas
El estudio realizado por Satse también concluye que son muchos los profesionales de enfermería que han realizado alguna denuncia, escrito de queja o similar respecto a las circunstancias de seguridad existentes en las semanas de crisis sanitaria.
En Cantabria los enfermeros son más combativos que en otras autonomías, ya que el 36,4 por ciento de los que han contestado la encuesta del sindicato enfermero ha realizado algún tipo de denuncia.
En Castilla-La Mancha ha denunciado el 34,3% de los profesionales y en Madrid lo ha hecho el 32,2%.
Donde menos denuncias y quejas ha habido ha sido en Baleares: solo lo ha hecho un 16,3% de los enfermeros y Murcia, con un 17,7%.
Ayuda psicológica
Durante la pandemia de la Covid-19 son muchos los enfermeros que han necesitado ayuda psicológica por la sobrecarga laboral y duras condiciones que han tenido que soportar, como estrés, ansiedad, contacto permanente con el dolor y, en muchas ocasiones, la muerte.
En este aspecto, los enfermeros de Madrid han sido los que han necesitado más ayuda, un 21,8% de ellos la ha pedido. Y los de Cataluña un 18,6%.
En Asturias solo un 7,7% de los enfermeros encuestados ha precisado ayuda psicológica y en La Rioja lo ha hecho un 8,5%, según el estudio de Satse.
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