¿Qué tienen en común aeropuertos, ministerios, grandes empresas y comisarías de policía? Se trata de edificios dotados con equipos de control de acceso y seguridad, incluyendo escáneres de rayos X para objetos, maletas, etc. Y estos equipos, a su vez, suelen ser compactos y fácilmente transportables.
Con esa tecnología en la mano, la empresa Orcrom Seguridad -perteneciente a Global Detection Group- ha desarrollado un equipo que combina los rayos X de uso médico con inteligencia artificial (AI) para “ayudar a detectar rápidamente casos de neumonía fuera del hospital”, según explica Carlos Bayarri, portavoz de la empresa.
El equipo, llamado Apolo D Smartcheck AI, tiene capacidad para realizar en torno a 400 placas de tórax diarias, y puede instalarse allá donde sea necesario, especialmente en caso de rebrote de la Covid-19, como residencias de ancianos y hospitales de campaña.
La detección precoz de la enfermedad por parte de esta tecnología consta de tres fases: “Primero, se le realizan al paciente una serie de preguntas, validadas por un equipo médico, que permiten a la AI evaluar el riesgo de infección”, describe Bayarri.
Si el riesgo es alto, se realiza al paciente una placa de tórax “por parte de un técnico o sanitario formado en el uso de la máquina”. La IA está asimismo entrenada para identificar en las imágenes obtenidas signos de infección pulmonar o neumonía, así como su extensión.
De este modo, las imágenes con sospecha de infección “se le harán llegar al médico responsable de evaluar a esos pacientes, que tomará la decisión pertinente según el caso, evitando sobrecargar los centros sanitarios y, al mismo tiempo, salvar vidas”.
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