¿Qué va a hacer usted para cuidar su salud en medio de esta pandemia del coronavirus? A esta pregunta recogida en una encuesta realizada por Stada, un 33% de los españoles afirmó que intentarían comer más saludablemente y hacer más ejercicio y un 14% que reforzaría su sistema inmunológico tomando vitaminas, como la C o la D; multivitamínimos (13%) y probióticos (10%).
Estos porcentajes se han traducido en un aumento de las ventas de estos productos en la farmacia. En el caso de Beatriz Collado, farmacéutica comunitaria en Madrid, las dispensaciones han pasado de 55 unidades en marzo de 2019 a 211 en el mismo mes de este año.
Ante esta situación de miedo al contagio, el mensaje del farmacéutico debe ser claro: “Hoy más que nunca es necesario alimentarse correctamente, con una dieta variada y rica en alimentos frescos. Los componentes de la dieta son clave para una buena función inmunitaria y, por tanto, para ayudarnos en la lucha frente a cualquier patógeno”. Son palabras de Francisco Pérez Cano, del Departamento de Bioquímica y Fisiología de la Universidad de Barcelona.
Cepas probióticas efectivas
Dicho esto, también defiende la tesis de que algunas cepas probióticas potencian la función defensiva a diferentes niveles, ya sea mejorando la función de barrera física (epitelios mucosos), microbiana (la propia microbiota) o la inmunitaria. “El efecto del uso de probióticos inmunoestimuladores durante el proceso infeccioso con la Covid-19 aún se desconoce. Pero, aunque no haya evidencias, en mi opinión, el papel clave de los probióticos se da a nivel preventivo, reforzando barreras e impidiendo que el virus penetre en el organismo e infecte”. Y añade que, a pesar de que en la farmacia existen numerosos complementos alimenticios que contienen probióticos, tan solo aquellos que dispongan de evidencias de su acción antinfecciosa pueden ser aconsejados. “Hay cepas específicas –continúa– que han demostrado ser efectivas en estudios clínicos de vacunación, donde se ha visto que facilitan una respuesta inmunitaria más efectiva, y otras que muestran que su toma reduce el porcentaje de casos de infección”. Collado le pone nombres y apellidos:“El Lactobacillus plantarum CECT 7315 (6.000 millones UFC) y Lactobacillus plantarum CECT 7316 (6.000 millones UFC)”.
Apostar por un patrón nutricional saludable
Emilia Gómez Pardo, doctora en Bioquímica y Biología Molecular, es tajante: “No hay nada, ni alimento ni producto, que prevenga o cure la infección por coronavirus”, y no cree que se deba recurrir a los complementos alimenticios para fortalecer el sistema inmunológico, “salvo que se tenga una deficiencia diagnosticada”. Lo mejor es apostar por un patrón nutricional saludable. “En las farmacias se están acabando los complementos de zinc, pero no hay que tomarlos, hay que comer alimentos que lo contengan”.
Y es que el zinc es uno de los minerales que refuerzan las defensas del organismo, junto a otros, como el selenio, el magnesio y el cobre, y vitaminas como la D, A, C, E y B.
En quién poner el foco
Según Amil López, farmacéutica y nutricionista, aunque sus colegas deban aconsejar la “ingesta de alimentos frescos y de temporada que garanticen su máximo contenido nutricional”, reconoce que “los terrenos están empobrecidos en micronutrientes y que no es fácil alcanzar las dosis diarias recomendadas de vitaminas y oligoelementos con la dieta tradicional”, por lo que ve “interesante tomar durante esta época un complemento”. En concreto, el boticario puede focalizar su recomendación “en inmunodeprimidos, en personas sometidas a mucho estrés físico o emocional o en caso de no seguir una dieta variada y equilibrada”.
Para Collado, los complementos de elección para recomendar son “los probióticos y los betaglucanos, acompañados de un potente antioxidante”.
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