Si las crisis abren ventanas de oportunidades, la Organización Médica Colegial (OMC) quiere aprovechar la brecha que la pandemia ha dejado en el sistema público sanitario para abordar a fondo el debate que ese mismo sistema tiene pendiente desde hace tiempo: la obligada reestructuración del Sistema Nacional de Salud (SNS) desde una perspectiva profesional y sanitaria.
Donde se lee "reestructuración", la crisis sanitaria obliga a sustituir el término por "reconstrucción", y ya tenemos el título de la mesa que inaugurará el próximo 23 de septiembre en Santander la primera edición de la Escuela la Profesión Médica, una iniciativa del Consejo General que, en palabras de su presidente, Tomás Cobo, pretende reunir a lo más granado del panorama sanitario español (especialistas de reconocido prestigio, expertos en docencia y Educación Médica, políticos y expolíticos, gerentes...) para "aportar nuestro grano de arena al sostenimiento de un modelo sanitario que representa, mejor que nada, el eje de nuestra justicia social: un sistema universal, equitativo, justo, accesible y que pretendemos que siga siendo sostenible".
Esta iniciativa, que tiene vocación de convertirse en cita anual y dotarse de una estructura estable, nace, según el presidente del Consejo General, de la necesidad de garantizar a los profesionales la formación en áreas transversales "de las que los colegios de médicos son garantes, pero en la que, sin embargo, no se encuentra una amplia oferta formativa". Oferta que, además, según Cobo, debe estar "libre de conflictos de intereses y acreditada internacionalmente".
Cobo ofrece la "asesoría gratuita" de la OMC a "todas las autoridades que quieran oírnos"
A garantizar ambos principios contribuye, en teoría, el hecho de que la iniciativa, además de por la OMC, esté auspiciada por el Consejo Profesional Médico Español de Acreditación para el Desarrollo Profesional y Formación Médica Continuada (Seaformec), como ha avalado hoy con su presencia en la presentación de la Escuela el director de este Consejo, Arcadi Gual.
El primer seminario de verano de la Escuela, que acogerá el santanderino Palacio de la Magdalena el 23 y 24 de septiembre, pondrá sobre la mesa recetas para esa necesaria reconstrucción, pero también analizará el tan traído y llevado continuo formativo del médico en una mesa cuyo título da ya bastantes pistas: "La evaluación en el continuum formativo de los médicos... ¿una quimera?". Y todo ello con la intención de que lo debatido no se quede entre las paredes de La Magdalena, sino de hacer llegar los consensos a quienes tienen que tomar decisiones, léase Ministerio de Sanidad y consejerías autonómicas. No en vano, puntualiza el presidente de la OMC y anfitrión de la Escuela, "esta casa ha ofrecido y seguirá ofreciendo su labor de asesoría gratuita, siempre bajo criterios científicos y estrictamente profesionales, a quien quiera escucharnos".
José Ramón Repullo, asesor de la Fundación para la Formación de la OMC, ha hablado específicamente de la "arquitectura de la reconstrucción", y lo ha hecho enfatizando que la "grave crisis" que padece actualmente el sistema y las "enormes tensiones" a las que se ha visto sometido en los últimos meses hacen inaplazable el abordaje de esa arquitectura desde una perspectiva multidisciplinar: "Sanitaria y asistencial, claro, pero también profesional, ética, administrativa...".
Y en el trasfondo de esa reconstrucción, el maná de los fondos europeos y cómo puede contribuir la aportación de la Unión Europea (UE) a la revitalización del SNS tendrá un papel destacado. La economista de la Salud Beatriz González López-Valcárcel; la vicepresidenta segunda del Congreso y exministra de Sanidad, Ana Pastor; el representante permanente de España en la UE, Francisco Sevilla Pérez, y el presidente de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc), Salvador Tranche -este último en representación de una primaria que, Repullo dixit, "nos preocupa especialmente"- abordarán las implicaciones económicas de esa reconstrucción.
Deficiencias formativas
Y si las recetas y propuestas para la reconstrucción son vitales, no lo es menos, según Cobo, la calidad y homogeneidad de la formación continuada que deben recibir los profesionales sanitarios, y ahí Gual -como suele ser habitual en él- ha sido muy claro: "La evaluación dirige el aprendizaje, de forma que cuándo nos dicen cómo nos van a evaluar y qué se nos va a exigir es cuándo planificamos acciones concretas y adoptamos pautas tendentes a pasar esa evaluación. Por ello, es más importante cambiar la evaluación, y adoptar consensos relativos a ella, que cambiar los programas formativos de grado, de posgrado o de formación continuada".
Al director de Seaformec no le duelen prendas en admitir sin ambages que "hay deficiencias importantes" en todos los estadios de la formación médica en España (grado, posgrado y formación continuada), y de esa constatación deriva una petición a todo el colectivo médico: "Urge reflexionar sobre todas esas carencias. La evaluación dirige el aprendizaje y por eso es necesario replantearse la evaluación de ese continuo formativo y tener una idea común de principio a fin".
Gual detecta "importantes deficiencias" en todos los estadios de la formación médica
En sintonía con Cobo, Gual ha puntualizado que la Escuela "no pretende hacer política, sino ser una estructura técnica y ofrecer a los profesionales las mejores alternativas formativas".
La Escuela de la Profesión Médica se engloba dentro del proyecto Buen Quehacer Médico (BQM), que la OMC puso en marcha en 2014 en forma de libro que pretende compendiar toda la oferta existente en competencias transversales y valores, un libro que va ya por su quinta edición. En Santander, también se inaugurará la exposición #BQMEnAcción, que consiste en una serie de viñetas de casos clínicos enfocados a facilitar una correcta actitud del médico. El objetivo es que esta exposición se lleve en los próximos meses a las sedes de los distintos colegios de médicos.
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