En Cataluña, más de un millón de pacientes que requieren una medicación específica la han podido recoger sin necesidad de ir al centro de Atención Primaria durante la crisis sanitaria generada por la pandemia de la Covid-19. El dato, anunciado la Consejería de Salud de la región esta semana, ha sido gracias a una medida, instaurada desde el Servicio Catalán de Salud desde el pasado 18 de marzo y en coordinación con el Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Cataluña, que permite que el usuario pueda ir directamente a la farmacia, con o sin el plan de medicación, ya que se le tramita mediante la receta electrónica. "No bastaba con aumentar las visitas telefónicas y las e-consultas por parte de los médicos si después hacíamos que el paciente fuera al ambulatorio a buscar el papel", ha detallado Caridad Pontes, jefa de la Gerencia del Medicamento del Servicio Catalán de lSalud ". Pontes también ha expuesto que vaciar estos centros es una de las claves para evitar nuevos brotes de contagio.
Desde la Administración catalana ha apuntado que el incremento de visitas a las oficinas de farmacia ha sido exponencial. En poco más de un mes y medio, se han reimpreso más de 693.000 planes de medicación vigentes en la misma farmacia, dado que los pacientes no llevaban el papel, y casi 500.000 planes adicionales de usuarios que se les había hecho cambios a la medicación. En todos estos casos se ha ahorrado el desplazamiento al centro de salud para ir a buscar una copia actualizada.
Por otra parte, y siendo al mismo tiempo otra medida excepcional, se ha permitido que los pacientes crónicos con prescripciones de larga duración, y que requerían renovarla, se les pueda continuar dispensando los tratamientos sin necesidad de ir al centro de Atención Primaria. En este sentido, son más de 66.000 pacientes los que han visitado directamente las farmacias. Sin embargo, Pontes asegura que en las próximas semanas este colectivo que presenta un plan caducado será necesario volver al médico para poder renovar. Esta medicación requiere que se revise por un especialista, ya que este determinará la necesidad, o no, de hacer algún cambio de tratamiento.
Consulta de la medicación
La medida permite que el farmacéutico pueda consultar la medicación del paciente a partir de la tarjeta sanitaria y pueda dispensar gracias a la receta electrónica. "Este es un claro ejemplo de cómo la farmacia se ha implicado activamente, en coordinación con la administración, para dar soluciones a los retos que plantea la actual crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19", ha explicado Jordi de Dalmases, presidente del Consejo de Colegios Farmacéuticos de Cataluña.
"Una vez más, los farmacéuticos hemos demostrado la importante tarea que podemos hacer en beneficio de los pacientes colaborando con el resto de agentes sanitarios, todo ello, acompañado de herramientas tecnológicas que ya estábamos acostumbrados a utilizar diariamente, el sistema de receta electrónica, y que demuestra la fortaleza de la red de farmacias en Cataluña ", ha añadido.
Por su parte, Pontes ha destacado que se ha conseguido "dar una respuesta rápida" a esta necesidad que requería la crisis actual y, recalca que se trata de "una medida excepcional" que habrá que revertir cuando termine la crisis, ya que la normativa vigente aún se basa en el uso de papel. Sin embargo, "hemos acelerado la implementación provisional de un camino que ya estábamos explorando para optimizar procesos y reducir el uso del papel, y en el que seguiremos trabajando para permitir su consolidación", recalca la gerente.
Pontes también ha recordado que esta respuesta inmediata ha sido posible gracias a que "la receta electrónica en Cataluña está muy bien consolidada, y funciona muy bien".
Nuevas formas de trabajar
Desde el Departamento de Salud de Cataluña también han apuntado que la pandemia ha obligado a desarrollar nuevas maneras de trabajar y potenciar las consultas telemáticas. "La crisis por la Covid-19 ha impulsado proyectos que, si bien ya estaban previstos, en este momento ha obligado a acelerar para dar una respuesta a las necesidades actuales", ha detallad0 Jaume Benavent, referente de Atención Primaria y Salud Comunitaria en el Área Asistencial del Servicio Catalán de la Salud. Benavent ha concretado que estas medidas se han tomado sobre todo para evitar los desplazamientos innecesarios, pero también servirán en un futuro para facilitar y disminuir la burocracia de estos trámites.
Según él, "el plan de medicación en papel continuará siendo una herramienta básica para muchos pacientes, es evidente, pero la consolidación rápida de formatos digitales no tendrá marcha atrás y conseguirá ahorrar tiempo de pacientes y profesionales".
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