Los pacientes corren constantes riesgos durante su tránsito por el hospital, pero también en sus domicilios, a juzgar por los resultados que un equipo de clínicos, ingenieros, científicos y especialistas en seguridad del paciente han obtenido al analizar incidentes, pruebas, observaciones, literatura y conversaciones con profesionales y pacientes durante el pasado año.
Valorando la gravedad, la frecuencia, la extensión y la dificultad de detectarlos de estos incidentes han elaborado un ranking con las tecnologías que más problemas de seguridad pueden causar durante este año. Estos son los resultados:
1. Los dispositivos médicos domiciliarios también caducan
Los pacientes que utilizan dispositivos de monitorización domiciliarios rara vez reciben información precisa y comprensible sobre la vida de dichos dispositivos, bache de información que no deja de crecer al ritmo que crece la atención médica domiciliaria.
Los productores de dispositivos pocas veces tienen comunicación directa con los pacientes que reciben atención domiciliaria, y los prestadores de salud no contactan con ellos para, de forma proactiva, informarles sobre las retiradas de productos o el fin de su vida útil.
Como resultado, los pacientes pueden enterarse de esta información con bastante retraso, y quizá de una fuente poco fidedigna, como un anuncio de televisión o las redes sociales. En consecuencia, puede haber pacientes que corran el riesgo de seguir utilizando un dispositivo que no es seguro o, por contra, dejar de usarlo cuando sí lo es.
Y es que, incluso cuando los pacientes son notificados, el lenguaje utilizado en estas notificaciones es difícil de comprender para algunos pacientes, que quizá no sepan determinar qué dispositivos están afectados por una retirada de mercado o qué hacer con ello.
2. Productos de un solo uso, cada vez más... y más defectuosos
El aumento inaceptable de productos sanitarios de un solo uso defectuosos sigue presente en la cadena de suministros.
Este tipo de productos se utilizan en prácticamente todos los actos médicos, por lo que sus fallos pueden causar un gran impacto negativo en el tratamiento de los pacientes, causando retrasos, incrementando costes y contribuyendo a la aparición de eventos adversos.
ECRI ha recibido informes sobre tubos y conectores rotos, catéteres y agujas cuya esterilización es cuestionable, y etiquetados incorrectos en los productos. El instituto se muestra preocupado porque estos problemas pueden derivar del poco esfuerzo de los productores para solventarlos; de hecho, en lugar de detectar una mejora, se está produciendo un incremento constante en los informes sobre estos problemas.
3. Errores de medicación derivados del uso incorrecto de los armarios automatizados
Los armarios y otros sistemas de dispensación automatizados suelen incorporar espacios o cajones que se bloquean y los profesionales que los utilizan deben introducir sus credenciales para abrirlos.
No obstante, en urgencias suelen desbloquearse estos sistemas de seguridad para acceder a la medicación más rápidamente, algo necesario pero arriesgado, ya que los fármacos no pasan la revisión del farmacéutico, responsable de asignar el medicamento correcto, en la dosis correcta y al paciente correcto.
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/oyEYNiP
No hay comentarios:
Publicar un comentario