Este lunes ha tenido lugar la undécima reunión entre la Consejería de Sanidad de Madrid y los integrantes del Comité de Huelga de médicos de Familia y pediatras de atención primaria de la región. Una vez finalizado el encuentro, Ángela Hernández, secretaria general de Amyts y miembro del Comité de Huelga, ha explicado que la reunión se ha iniciado con la insistencia de la Administración de mantener su propuesta, sin incluir un "posicionamiento presupuestario"; algo que, desde el punto de vista del comité, "es absolutamente necesario como plan de choque".
Y es que, desde Amyts defienden que es clave "un esfuerzo de la Administración para frenar la sangría de médicos de Familia y pediatras que abandonan la atención primaria", y para que se queden los residentes que terminan su residencia en mayo. "Hay 300 especialistas de Medicina Familiar y Comunitaria y de Pediatría que, dependiendo de lo que hagamos en estos meses, van a decidir si se quedan y revierten su conocimiento en las plazas vacantes de la Comunidad de Madrid o si buscan otros horizontes, ya sea en otras comunidades o en otros países", ha expuesto Hernández.
Ante esta situación, Hernández ha anunciado el Comité de Huelga ha hecho "un esfuerzo adicional" y, en una contrapropuesta, "ha disminuido las líneas rojas" que había fijado. Esto se traduce en una bajada del refuerzo retributivo que pedían de 479,77 euros a 400 euros y en fijar la incentivación de las tardes en un 10% sobre la media del salario bruto (en lugar del 15% pedido inicialmente). La propuesta será trasladada por escrito a la Consejería de Sanidad.
"Consideramos que esto es un esfuerzo muy importante para intentar destrabar esta situación y este conflicto de huelga indefinida, que es muy gravoso para profesionales y pacientes", afirma Hernández.
Evitar la "fuga" de profesionales
Antes del inicio de la reunión, Hernández ha señalado que el objetivo principal de este nuevo encuentro era seguir trabajando para "resolver el conflicto" que supone "la fuga de médicos de Familia y de pediatras en la Comunidad de Madrid".
"Llegamos a este conflicto en una situación de la atención primaria madrileña en la que más del 20% de las consultas de médicos de Familia están sin médico de Familia, y calculamos que más del 30% de las consultas de Pediatría de atención primaria. Esto es una auténtica barbaridad y ese es el problema: el millón de madrileños que a día de hoy no tienen un médico de familia o un pediatra asignado. De ese millón calculamos que 200.000 son niños", ha expuesto.
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