"El sistema sanitario está al límite, todo hace agua". Álvaro Rodríguez-Lescure, presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), fue claro el pasado lunes, en la presentación del informe Las cifras del cáncer en España 2021. El aspecto crítico, desde su punto de vista, es de los futuros pacientes "que están fuera del sistema y que se encuentran en un limbo diagnóstico, porque los retrasos impactan negativamente en los resultados y en las oportunidades".
Las instituciones sanitarias se han ido adaptando a los retos de la pandemia. Escarlata López, directora médica de Genesis Care España y experta en Oncología Radioterápica, relata cómo "desde un principio me di cuenta de que nuestras unidades debían funcionar como quirófanos. Y como en nuestra especialidad también tenemos entrenamiento quirúrgico empezamos a funcionar igual y solo podía acceder el paciente, por lo que se redujo al máximo el aforo de las salas de espera".
El personal fue dotado con equipos de protección como mascarillas, pantallas faciales y batas, guardando la distancia de seguridad, con líneas de seguridad y pantallas fijas. "El objetivo era que el paciente estuviera en la unidad el menor tiempo posible y agilizar tanto el acceso como el tratamiento". Otra ventaja que destaca es que "afortunadamente solemos tener accesos distintos a las unidades que el resto de los sanitarios".
"También -añade- hemos optimizado las dosis. Es lo que se denomina hipofraccionamiento: consiste en dar el mismo número de dosis biológica equivalente, pero en menos sesiones. Queríamos que los pacientes acudieran el menor número de veces al centro para evitar contagios tanto en el traslado como dentro del propio centro. El hipofraccionamiento permite, además, poder acabar los tratamientos y no dejarlos a medias".
Una actuación clave fue la creación de un comité covid para llevar un control exhaustivo y rastreo de todos los posibles casos de pacientes, empleados o familiares. "Esta iniciativa ha ido tan bien que se ha publicado en una revista científica de referencia, Radiotherapy & Oncology", subraya. Por otro lado, Genesis Care ha puesto en marcha, como parte de su responsabilidad social, un teléfono para segundas opiniones gratuitas.
Todavía, a día de hoy, no se ha recuperado la normalidad. "Los pacientes tienen mucho miedo", subraya la doctora López, que apunta además el colapso de la medicina de familia a causa de las PCR y la vacunación. "Pero entienden los cambios en la atención y nos dan mucho las gracias por mantener las medidas de seguridad y potenciar las consultas por teléfono. E insisto que los pacientes tienen que saber que pueden perder el miedo a ir al médico, siempre que se haga de forma segura".
¿Cómo ha afectado a los pacientes? Inma Escriche, paciente de cáncer de pulmón y vocal de la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (AEACaP), detalla que la pandemia le está perjudicando indirectamente. "Se considera que soy de alto riesgo para la covid-19, por lo que he estado aún más encerrada que el resto de personas, lo que ha implicado una serie de problemas físicos como pérdida de masa muscular y capacidad pulmonar. Y salir a la calle y pisar la acera me daba inestabilidad", lamenta.
Otro aspecto que destaca es el ámbito emocional. Inma lleva más de un año sin ver a sus padres "y apenas he quedado con dos amigos, con mucha precaución".
En su caso, los tratamientos -como la quimioterapia- no se han interrumpido pero admite que su caso es especial, al estar en un ensayo clínico.
"Sí sé que a otros pacientes les han acortado las sesiones por el peligro de acudir al hospital. A mí me han afectado los efectos secundarios de los tratamientos, con pruebas que se han tenido que retrasar o visitas con otros especialistas. Y, como soy paciente de alto riesgo, no puedo hacer rehabilitación de la mano, que tengo dañada desde hace dos meses".
Ana Casas es oncóloga médica y presidenta de la Fundación Actitud frente al Cáncer. "Los sentimientos son muy variables: hay pacientes que tienen miedo y algunos están enfadados por no haber sido tratados como debían. Otros me relatan que necesitan más seguridad y más espacios limpios. También están los que destacan los esfuerzos que están haciendo los servicios sanitarios", enumera.
Su experiencia respecto a la telemedicina es que, en un principio, "había ciertas reticencias. Pero a los pacientes les ha ido gustando a medida que se han ido conectando, aunque hay muchas diferentes entre atención primaria y Oncología".
Respecto al menor porcentaje de nuevos casos diagnosticados, la doctora Casas lo achaca "al miedo tanto a ir a hacerse pruebas a los centros sanitarios como a que se han suspendido programas de cribado y pruebas radiológicas, sobre todo en la primera oleada de la pandemia".
En cuanto a los tumores menos frecuentes, Arantxa Sáez cuenta su experiencia como paciente y presidenta de la Asociación Española de Cáncer de Tiroides (AECAT). "Como estos tumores no son mortales, en la mayoría de los casos se aplazaron las pruebas en marzo a después del verano, con diagnósticos de enero del año pasado que no se han podido operar hasta muchos meses después. Hay crispación, porque sentimos que somos pacientes menos importantes y no nos operan y, si los casos no son urgentes, se priorizan otras patologías", denuncia.
Aunque agradece la predisposición de oncólogos y cirujanos, su principal preocupación es cómo se retomará el ritmo. "¿Nos centraremos en la teleconsulta? ¿Volveremos a la atención presencial? Si es así, ¿cómo? Nadie responde a estas preguntas. Es desesperante", concluye.
Médicos y personas con tumores denuncian las dificultades para el diagnóstico y manejo oncológico durante la pandemia dia-mundial-del-cancer Día Mundial del Cáncer Off Javier Granda Revilla Offvia Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/3toUdXD
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