El Principado de Asturias ha sacado adelante con el apoyo de cinco de las seis organizaciones sindicales, entre ellas Simpa y Satse, la regulación de un nuevo modelo organizativo y retributivo para la AP que supone "un cambio de paradigma", según señalan los agentes sociales, con respecto al vigente en la actualidad, mantenido desde hace 18 años.
El nuevo modelo ha sido impulsado por dos circunstancias fundamentales: la escasez de profesionales sanitarios y la desaparición de la figura de los médicos y enfermeras eventuales, dado que pasan a ser todos interinos.
Esto obliga a una restructuración de la organización de la jornada para conseguir un reparto más equitativo del vigente hasta ahora, sobre todo, en lo que a asunción de la atención continuada se refiere, y la aprobación de un nuevo complemento retributivo para tratar de recompensar el exceso de jornada realizado más allá de la jornada ordinaria y de la extraordinaria.
Con el nuevo modelo los médicos que se encargan del Servicio de Atención Continuada y los eventuales transformados en interinos pasan a estar más integrados en los equipos de AP, "adscritos éstos a uno o dos centros pero ya no con una vinculación de área sanitaria, como sucedía hasta ahora, lo que hacía que estuviesen un día en un centro y otro en otro, rotando por todo el área. Ahora la organización de su jornada va a ser mucho más ordenada y dejan de estar deslocalizados. Y todos van a tener una jornada definida, tanto ordinaria como en cuanto a guardias, que será distinta en centros urbanos y rurales pero siempre definida", explica José Antonio Vidal, secretario general del Simpa.
La oferta además de todas las vacantes de Equipo de Atención Primaria que se produzcan garantiza a los profesionales que puedan empezar trabajando en el SAC "que no tendrán que estar ahí para siempre sino que podrían ir progresando e integrándose aún más en los equipos".
El personal de este servicio es así en principio el más beneficiado con la reforma dado que lo que se hace con la misma es tratar de repartir mejor el peso que supone garantizar la atención sanitaria fuera de la jornada ordinaria habitual de 8 a 15 horas.
Esta reforma es un primer paso porque el acuerdo alcanzado por la Administración con los sindicatos contempla que la nueva estrategia para la AP en las que vienen trabajando desde hace tiempo y el nuevo modelo para la urgencia estén listos en un plazo máximo de un año, y que ahí se recoja la fusión del SAC con el Servicio Urgente de Atención Primaria para crear un único servicio de atención a la urgencia extrahospitalaria.
Hasta entonces el SAC consigue que por fin que se haga realidad la percepción de un complemento retributivo de 398 euros para el personal médico y 239 euros para enfermería que los equipara con el SUAP y que a pesar de que se había comprometido en reiteradas ocasiones aún no se había llevado a la práctica.
El acuerdo ha servido también para reconocer la carga asistencial que está suponiendo actualmente la realización de guardias en Primaria “que va mucho más allá de lo que es una guardia, porque es estar viendo pacientes constantemente, sin descanso, con centenares de pacientes en una tarde”. Esta penosidad se va a compensar en parte con una minoración de la jornada.
Esto se traduce en una disminución de las 54 horas mensuales que de promedio puede realizar un profesional en concepto de guardias a 21 horas en los centros urbanos "para compensar esa penosidad", explica José Antonio Vidal.
El tope de jornada para el SAC, que trabaja siempre en tardes, noches y festivos, se fija en 170 horas mensuales en ámbito rural y 150 en ámbito urbano.
Con esto no será posible cubrir todas las necesidades de la atención continuada, dada la dispersión de la población y el mantenimiento en Asturias de 67 puntos de atención continuada y dado el hecho de que permanecen sin cubrir unas 175 plazas de profesionales de plantilla en AP, según los datos facilitados por el Simpa.
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