Las técnicas robóticas con ya una realidad, y un apoyo indiscutible, en la realidad quirúrgica del día a día. Sus características de mínima invasión y máxima precisión se han ido imponiendo en intervenciones, incluso oncológicas, hasta el punto de que, en estos momentos, son cada vez menos los procesos -perfectamente evaluados e indicados-, en los que la asistencia robótica no forma parte integral de las cirugías.
Su utilización comenzó a introducirse en la década de los años 80, sobre todo para llevar a cabo biopsias en localizaciones complejas. Fue a partir de los años 90 cuando distintos asistentes y sistemas robóticos comenzaron a posicionarse hasta que en el año 2.000, la FDA aprueba la cirugía robótica, más concretamente el ya de sobra conocido sistema Da Vinci para intervenciones abdominales. A partir de este momento, el perfeccionamiento de los sistema de software de los robot desarrollados, ha ampliado indicaciones en numerosos ámbitos quirúrgicos.
La investigación e innovación en el ámbito tecnológico es un hecho imparable que, entre otros aspectos, busca aunar técnicas mínimamente invasivas cuyas ventajas individuales doblan el beneficio para los pacientes.
En el abordaje de las patologías de columna la suma de los beneficios es de especial importancia dada la complejidad que presentan muchas de ellas. Uno de los ejemplos más recientes de asociación de tecnologías mínimamente invasivas es el que ha llevado a cabo el neurocirujano, Pablo Clavel, director de Instituto Clavel, con sedes en Madrid y Barcelona, quien ha realizado una cirugía innovadora en la que la combinación de dos técnicas no invasivas ha permitido intervenir a una paciente de 60 años que presentaba una hernia discal de gran volumen y de localización compleja.
Esta intervención de columna ha combinado el abordaje robótico, mediante el robot Mazor X, y la endoscopia, lo que la convierte en pionera en el mundo en sus características. "El abordaje habitual de esta hernia, que por su localización compleja podría haber sido una tumoración de difícil acceso, hubiera requerido de una fusión o una cirugía amplia para su extracción", señala Clavel, en cuyo centro se acometen cirugías complejas de columna y cráneo utilizando métodos poco invasivos basados en tecnologías vanguardistas.
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