“Uno de los grandes problemas que tenemos en España es la falta de un registro nacional de cáncer; es un problema muy serio. Otros países, como Holanda, sí lo tienen, e incluso hacen auditorías anuales para ver quién tiene más riesgo de recaída, quién no tiene acceso a determinados tratamientos”, ha recordado hoy a este diario Isabel Rubio, miembro del comité organizador del 13º Congreso Europeo de Cáncer de Mama (EBCC 2022) que se celebra en Barcelona con la asistencia de 1.500 representantes de 80 países. Confirma la experta que hay desigualdad entre países europeos en el acceso a terapias innovadoras y recuerda que en España, una vez incorporadas esas terapias a la cartera de prestaciones públicas, luego hay desigualdad en el acceso entre comunidades autónomas. “La única manera de solucionarlo es un registro nacional de cáncer; sin él, no sabemos qué pacientes no tienen acceso a los tratamientos”, critica. E informa que es algo que preocupa a la Comisión Europea.
Rubio, que también es presidenta de la Sociedad Europea de Cirugía Oncológica y directora de la Unidad de Patología Mamaria de la Clínica Universidad de Navarra, ha explicado sobre el EBCC, “la multidisciplinariedad; aquí nos juntamos básicos y clínicos, radiólogos, radioterapeutas, cirujanos, oncólogos médicos, psicooncólogos, etc, porque las pacientes con cáncer de mama tratadas así tienen más beneficio y aumenta su supervivencia”.
Esta especialista va a intervenir en el congreso para hablar sobre decisiones sobre cirugía axilar compartidas con las pacientes. Al respecto avanza que la linfadenectomía no es un estándar (para todas las pacientes) sino que se integra en la medicina personalizada, en la que se tiene en cuenta el punto de vista (preferencias, asunción de riesgos) de la mujer. “Se valora el subtipo molecular (del tumor), la edad y las características de la paciente, lo que quiere y cómo evitar morbilidad”, afirma. Y apunta que la personalización del manejo del cáncer de mama también se da en la radioterapia: “Ya no se irradia toda la mama sino que puede hacerse de manera parcial, intraoperatoria, con protones, etc. Hay múltiples opciones a discutir con la paciente”. Todo eso, “es importante que se haga en un centro de atención multidisciplinar al cáncer de mama”, ha insistido.
En cuanto a la detección precoz, Rubio defiende, en la misma línea, un cribado personalizado y adaptado a cada mujer, en base al riesgo individual de padecer la enfermedad. “Están a punto de salir recomendaciones europeas sobre el screening personalizado, pero esto no se puede lograr de una día para otro. Hay estudios en marcha para valorar que las mujeres que más riesgo tienen sean sometidas a un seguimiento diferente. A las que tienen una mutación ya se les hacen pruebas radiológicas y les funciona, pero ahora hay que valorar si, ante un aumento del riego (por ejemplo, el diagnóstico de un caso en la familia), habría que cambiar el método actual por mamografías en intervalos diferentes. Esto va a suceder así, pero hay que tener en cuenta que los cribados poblacionales son sobre miles y miles de personas y cambiarlos, cuesta”.
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/BlwMULq
No hay comentarios:
Publicar un comentario