Ser un auténtico experto en consejo dermocosmético es mucho más que un farmacéutico que conoce la piel, sus patologías, los activos relevantes y los protocolos de actuación dermofarmacéutica.
Siendo esto muy importante, un farmacéutico que se posicione como experto en consejo dermocosmético, además, "debe estar familiarizado con las nuevas tendencias del mercado, la digitalización en el ámbito farmacéutico y los aspectos legales y éticos del consejo dermofarmacéutico", defiende Gloria Carrasco, directora de Educación y Congresos Farmacéuticos de L´Oréal Dermatological Beauty (LDB), que acaba de clausurar la primera edición del curso on line Dermatological Advice Qualification (Cualificación en Consejo Dermocosmético), impartido por LDB en colaboración con la Universidad de Alcalá (UAH).
Carrasco añade que la visibilidad es otro aspecto fundamental. "El experto en dermocosmética -argumenta- no solo debe tener un papel proactivo dentro de la farmacia, sino también construir su reputación como referente confiable en el ámbito del cuidado de la piel".
Para ello es clave la capacidad de actualización. "El mercado dermocosmético evoluciona rápidamente, con nuevos productos, ingredientes activos y estudios sobre la piel que aparecen constantemente", dice la experta. Por ello, "debe ser capaz de mantenerse al día con las nuevas tendencias y avances científicos".
Asimismo, defiende que los expertos en consejo dermocosmético estén alineados con la creciente tendencia hacia la sostenibilidad". Y es que, constata que, con la preocupación por el medio ambiente en aumento, "los consumidores buscan productos que no solo sean eficaces, sino también respetuosos con el entorno". Por ello, hace hincapié en que "este experto en consejo dermocosmético debe conocer las certificaciones de productos sostenibles y estar preparado para asesorar a los clientes sobre opciones que no comprometan ni la salud ni el medio ambiente". A su juicio, "este conocimiento puede marcar la diferencia a la hora de recomendar productos que cumplan con las expectativas éticas de los consumidores".
Habilidades blandas
No se olvida de lo importante que es que este perfil de profesionales reúnan una combinación de habilidades técnicas y blandas para desempeñar su función de manera efectiva.
Para ella, entre las más importantes está la capacidad de comunicación. "Es crucial que pueda comunicar de manera clara y eficaz tanto con el cliente como con otros profesionales de la salud. Debe ser capaz de explicar de manera sencilla las características de los productos y sus beneficios, así como ofrecer recomendaciones personalizadas en función de las necesidades específicas del cliente".
Otra es la empatía. "Dado que muchos clientes buscan ayuda para mejorar aspectos de su salud o apariencia que les pueden generar incomodidad o inseguridad, la empatía es clave. Comprender el problema desde la perspectiva del cliente y ofrecer soluciones adaptadas es esencial para ganar su confianza".
Todo ello debe complementarse con el dominio de las técnicas de venta, "que no solo promuevan los productos, sino que ofrezcan un valor real al cliente, contribuyendo a que éste se sienta satisfecho y bien atendido".
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/0OU5ZYt
No hay comentarios:
Publicar un comentario