Este miércoles ha tenido lugar en los juzgados de Bruselas la vista de la primera reclamación que la Unión Europea planteó a AstraZeneca por incumplimiento del contrato de entrega de vacunas. En este procedimiento, el primer de los dos abiertos contra la farmacéutica, los 27 estados miembros han solicitado únicamente el cumplimiento del contrato con la entrega de las dosis de vacunas acordadas. Sin embargo, en esta vista también se ha hablado del siguiente procedimiento, donde sí hay una petición de indemnización.
Según recogen las agencias que han estado cubriendo el juicio, la Unión Europea reclamará a AstraZeneca una compensación de 10 euros por día de retraso a partir de julio en cada dosis comprometida, una cantidad que podría alcanzar los 200 millones diarios, según indicó este miércoles la defensa de la Comisión y los Estados miembros de la UE en el juicio contra el laboratorio.
La Comisión solicitará, además, una penalización de al menos 10 millones de euros al laboratorio que distribuye la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford, según dijo en el tribunal francófono de primera instancia de Bruselas el abogado Rafaël Jafferali, que representa a la Comisión Europea y a los Estados miembros de la UE.
Dos procedimientos abiertos
Esa reclamación, no obstante, no se efectuará en este juicio con carácter de urgencia, sino que se trasladará esa reclamación a otro proceso, con carácter ordinario, cuya primera vista está programada en septiembre y el veredicto no se producirá antes de 2022.
En este proceso de urgencia, cuyo fallo se conocerá antes de julio, la Comisión y los países de la UE buscan que la corte obligue a AstraZeneca a entregar las dosis que faltan de su vacuna. Según han asegurado los portavoces de la Comisión, el Ejecutivo no persigue una indemnización económica en sí misma, sino utilizar esa amenaza como palanca para que la farmacéutica entregue las dosis que faltan.
La UE reclama que las entregas antes de julio lleguen al menos a los 120 millones de dosis, con lo que la indemnización que solicitará podría alcanzar los 200 millones de euros al día, más una multa. AstraZeneca, que defenderá sus argumentos ante el tribunal en la tarde de este miércoles, ha adelantado ya que entiende que el calendario de entregas era "indicativo" y que el contrato solo le obligaba a hacer "mejores esfuerzos razonables" para entregar los fármacos en esos plazos.
"Este no es un contrato para la entrega de zapatos o camisetas", ha dicho el abogado de AstraZeneca, Hakim Boularbah, a la corte este miércoles, enfatizando la complejidad de fabricar una nueva vacuna.
Las acusaciones de la UE fueron "impactantes", ha dicho Boularbah, y ha señalado que la compañía había formulado sus objetivos de entrega basados en estimaciones iniciales de capacidad de producción. Agregó que la vacuna se vendió a precio de costo. AstraZeneca ha dicho repetidamente que el contrato no era vinculante, ya que solo se comprometía a hacer "los mejores esfuerzos razonables" para administrar las dosis.
"Las dosis producidas en Gran Bretaña estaban reservadas bajo un contrato que el gobierno británico firmó con la Universidad de Oxford"
Jafferali, el abogado de la UE, ha replicado que ese principio no se había respetado porque la farmacéutica no había entregado al bloque 50 millones de dosis producidas en fábricas que figuran en el contrato como proveedores de la UE, incluidas 39 millones de dosis fabricadas en Gran Bretaña, 10 millones producidas en Estados Unidos y 1 millón en Holanda. El abogado ha apuntado en el juicio que estas dosis fueron "desviadas" a otros clientes.
Sin embargo, la compañía ha replicado que las dosis producidas en Gran Bretaña estaban reservadas bajo un contrato que el gobierno británico firmó con la Universidad de Oxford, que desarrolló la vacuna.
El abogado de AstraZeneca ha aclarado que las fábricas británicas se mencionaron en el contrato de información de la UE, pero no había ningún compromiso de usarlas. Se esperaba que produjeran vacunas únicamente para Gran Bretaña hasta febrero de 2021, cuando la compañía esperaba entregar 100 millones de dosis a Londres. Por su parte, Jafferali ha recordado que AstraZeneca se había comprometido en el contrato de la UE a no tener otros compromisos que le impidieran cumplir con los términos del acuerdo.
Tiempos de respuesta
Otra parte del litigio se centró en aclarar los tiempos de comunicación de la falta de vacunas. En este sentido, el abogado de la UE también dijo que AstraZeneca no había comunicado a la UE de manera oportuna la magnitud de sus problemas de suministro, porque envió repetidamente mensajes, incluso públicamente, de que podía cumplir sus objetivos, antes de admitir finalmente que hubo grandes déficits en marzo.
La compañía había advertido a la UE en diciembre sobre problemas de producción, pero se comunicó solo a fines de enero, justo antes del inicio de las entregas, un recorte mucho mayor de lo esperado inicialmente para el primer trimestre. Sin embargo, Boularbah ha asegurado que AstraZeneca había mantenido continuamente informada a la UE sobre sus planes y problemas de producción.
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