La detección de casos de coronavirus en España comienza a beneficiarse de una segunda generación de test de antígenos que ya han llegado a las comunidades autónomas y aliviarán la sobrecarga en la realización de PCR. También funcionan a partir de muestras nasofaríngeas, proporcionan una detección muy rápida y sencilla del virus y prometen un alto grado de sensibilidad y especificidad a un coste mucho menor.
Este tipo de test no requiere instrumentación y pueden ser utilizados en el punto de atención. La Comisión de Salud Pública ha pedido que se priorice su aplicación en individuos con síntomas de covid-19, ya que es donde han demostrado su fiabilidad.
De esta segunda generación de pruebas de antígenos, que nada tiene que ver con los test fallidos que llegaron a España en el pico de la pandemia, el que está más avanzado es Panbio Covid-19 Ag, de Abbott, explica a DM Julio García Rodríguez, jefe de Servicio de Microbiología del Hospital La Paz (Madrid). La prueba del laboratorio americano está siendo sometida a estudios de validación en hospitales españoles y en el Centro Nacional de Microbiología (CNB) para determinar su utilidad en condiciones reales de uso.
Autocertificación
Test como Panbio están avalados por el marcado CE, que permite la comercialización en países europeos como España, pero es un sistema de autocertificación. En Estados Unidos, la FDA está dando luz verde a test de coronavirus por la vía de la autorización de uso de emergencia e investiga su fiabilidad tras su puesta en el mercado. Por eso es importante conducir estudios de validación en los escenarios en los que se plantea su uso.
Los test de antígenos han demostrado una alta fiabilidad en individuos con síntomas
Panbio ha sido validado para los primeros siete días desde el inicio de síntomas, pero su fiabilidad aumenta si se emplea en los cinco primeros, sostiene David Navarro, jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Clínico de Valencia. En un encuentro virtual organizado por la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc), Navarro advirtió de que los test de antígenos “no están validados en personas asintomáticas”.
Más de antígenos
También Roche anunció el lanzamiento de un test de antígenos a finales de septiembre, “con una sensibilidad del 96,52% y una especificidad del 99,68%”. Aunque “a priori parece que viene avalado por buenos resultados”, García Rodríguez señala que “habrá que hacer evaluaciones independientes para ver su posible utilidad”.
El experto recuerda que la PCR sigue siendo el patrón oro y que las pruebas de antígenos tienen una sensibilidad inferior, “que se podría perder en los casos con cargas virales más bajas y hay algunas dudas en cuanto a especificidad; se necesitan más valoraciones que descarten las reacciones cruzadas con otros coronavirus”.
Hallar el nivel de anticuerpos que confiere inmunidad llevará a test más fiables
Otra novedad próxima con la que se espera contar en otoño son los nuevos sistemas que permiten detectar coronavirus y virus como el de la gripe o el respiratorio sincitial (VSR). La Seimc y varias comunidades autónomas están trabajando en protocolos que determinen cuándo aplicar estas pruebas.
De anticuerpos
Mientras, continúan los desarrollos en test de anticuerpos. La FDA ha autorizado ya unas cuarenta pruebas serológicas pese a las incertidumbres sobre el valor de sus resultados. La consultora Evaluate destaca la iniciativa de la alemana Siemens Healthineers de investigar con los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos y la Comisión Europea el título mínimo de anticuerpos para considerar que una persona es inmune y alcanzar un estándar en los test serológicos.
De momento, Roche tiene en cartera el test Elecsys-Anti-SARS-CoV-2 S que mide cuantitativamente el nivel de anticuerpos. La suiza defiende que la prueba puede ser útil para evaluar la eficacia de vacunas en desarrollo y de la terapia con plasma convaleciente.
Hay un test de anticuerpos en saliva, pero tiene que validarse en condiciones reales de uso
Otra novedad en test serológicos proviene de Abbott, con una prueba basada en la inmunoglobulina M (IgM). Tras desarrollar un test de IgG, el anticuerpo que dura más en el organismo tras la infección, “la IgM es más útil para determinar una infección reciente”.
Saliva
Por otra parte, otra línea de desarrollo es la sustitución de muestras nasofaríngeas o de sangre por saliva. La sensibilidad en la detección del virus en saliva por PCR en los primeros siete días de la sintomatología es muy alta, afirma el presidente de la Seimc, Jordi Vila, del Clínico de Barcelona. “No se sabe en individuos asintomáticos, como se quiere hacer Galicia”.
A la espera de contar con pruebas de antígenos con saliva, la británica Medusa 19 tiene un test de anticuerpos que en 10 minutos detecta IgM e IgG. La saliva permite detectar más rápidamente la presencia de anticuerpos que la sangre, afirma Pablo Castán, que ha participado en el desarrollo desde un laboratorio de transferencia tecnológica en el Hospital Carlos III, junto con investigadores de centros como La Paz y el CNB.
Propone como uso potencial del test dar seguridad de cara a la asistencia al lugar de trabajo o colegios. Pero de momento García Rodríguez se muestra cauto y recuerda las limitaciones de los test de anticuerpos en la detección aguda de la infección: “Habrá que esperar a validaciones en el mundo real”.
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/3jeIWni
No hay comentarios:
Publicar un comentario