El ministro de Sanidad, Salvador Illa, no ha cedido y se ha mantenido firme en su rechazo a la petición de confinamiento domiciliario solicitado por el Gobierno del Principado de Asturias, ante el inesperado aumento de casos de Covid-19 en los últimos días y que han puesto a las infraestructuras sanitarias asturianas en una difícil situación. Illa ha pedido al consejero de Salud asturiano, Pablo Fernández, información sobre las últimas medidas adoptadas y tras recibirla le ha dicho que es necesario esperar unos días para ver la eficacia de esas medidas.
Al encuentro telemático celebrado este mediodía han asistido Illa y Fernández acompañados de sus respectivos equipos. Al término de la reunión ambas partes han enviado un comunicado conjunto en el que explican que han acordado celebrar una nueva reunión bilateral de seguimiento de la situación, adicional a la celebración del Consejo Interterritorial de Salud. En la reunión mantenida esta mañana el consejero asturiano ha desgranado al ministro la situación epidemiológica y asistencial de Asturias, y la evolución de los últimos días que ha tensionado a la organización sanitaria.
Además, Fernández ha explicado al ministro las medidas para intentar abordar la situación puestas en marcha en los últimos días, tanto para limitar la movilidad de la población, como desde la organización sanitaria para intentar afrontar el aumento de los casos, en particular en lo que dotación de camas de UCI se refiere y a la habilitación de nuevos espacios para atender a los pacientes que requieren hospitalización.
El ministro se ha mantenido firme en que “debe darse tiempo”, según el comunicado de ambas administraciones, para ver los efectos estas medidas y comprobar su eficacia en la evolución de la pandemia, “antes de dar nuevos pasos”.
La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, se expresaba en la misma línea que Illa tras el Consejo de Ministros ante la petición de permitir confinamientos domiciliarios que también están reclamando o barajando otras autonomías como País Vasco, Andalucía, Cataluña, Castilla y León o Melilla: “el decreto del estado de alarma permite es una amplia batería de medidas para que los presidentes autonómicos en función de la evolución de la epidemia y situación del sistema sanitario puedan adoptar las medidas con la contundencia que en cada momento e exige"
"Estamos dialogando con las autonomías, también con Asturias, - ha continuado Montero- y por tanto habrá que ir adoptando las medidas con contundencia pero también con la prudencia de ver cómo funcionan las que tenemos ahora mismo en vigor, en términos de números de contagios, personas que fallecen y que ingresan en los hospitales. Deseamos y confiamos que las medidas tengan su reflejo en las próximas semanas” y no llegue a ser necesario ese confinamiento domiciliario que, con todo, es probable que varias autonomías planteen en el Consejo Interterritorial que se celebrará mañana.
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