Los accidentes de tráfico son una contingencia asociada al trabajo que hacen los profesionales que asisten en vehículos de emergencias. Sin embargo, no son frecuentes; los conductores de ambulancia y los pilotos de helicóptero tienen formación específica y los protocolos de seguridad son claros. “Todos somos conocedores de que el trabajo en la vía pública hay que hacerlo con botas de seguridad y colores de alta visibilidad. Y sabemos que hay que aparcar el vehículo o aparcarlo mal, por ejemplo, en las autopistas invadiendo el carril para obligar a los coches a que se desplacen al otro”, aclara el jefe de la Base Medicalizada de Orense de la Fundación Pública Urgencias Sanitarias de Galicia-061, David Sánchez Campos.
Saber hacer un buen triaje ayuda a gestionar el estrés cuando es urgente atender a varios pacientes
Según su testimonio, se pueden producir roturas de ligamentos de rodilla o fracturas de brazo, pero las consecuencias más frecuentes son leves: hematomas o esguinces. “Las ambulancias son de los pocos vehículos que pueden llevar pasajeros en posición transversal y, a veces, puedes parar la ambulancia y otras no”, razona Sánchez. Los profesionales tampoco suelen ser descuidados, pero, de nuevo, mandan las necesidades del paciente y la obligación de actuar con rapidez: “Dejamos al paciente listo antes del traslado y nos ponemos el cinturón, pero, a veces, tienes que levantarte varias veces y otras tienes que ir de pie todo el tiempo”.
Lo cierto es que es prácticamente imposible evitar los golpes al cien por cien. Sin embargo, hay algunos consejos útiles que transmite el experto: “Hay que ir apurado pero intentar no correr. Es más fácil tener un traspiés si vas corriendo que si vas apurado. También hay que llevar siempre los equipos de seguridad”.
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/PbNr4aE
No hay comentarios:
Publicar un comentario