Sigue aumentando la presión de la sanidad sobre el Gobierno de Madrid. Las organizaciones sindicales de la Mesa Sectorial de Sanidad (Satse, CCOO, Amyts, CSIT Unión profesional y UGT) han convocado movilizaciones a partir de la próxima semana para denunciar la paralización de toda mejora laboral que se había pactado con la Consejería de Sanidad antes de la pandemia de la Covid-19.
En primera instancia, los sindicatos han convocado concentraciones en las puertas principales de los centros sanitarios, el martes 15 de septiembre a las 12:00. El siguiente día de movilización sería el 21 de septiembre ante la sede de la Consejería de Sanidad. Las centrales aseguran que están dispuestas a endurecer las medidas de presión, "sin descartar la convocatoria de paros parciales o totales".
Aunque coincidentes en el tiempo, estas medidas de presión van aparte de la estrategia de Amyts, que solicitó una reunión con la presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso, fundamentalmente para abordar la situación de la atención primaria.
El sindicato médico ha señalado que podría convocar una huelga para los facultativos durante este mes de septiembre, dado el mayoritario apoyo que recibió la medida en una encuesta que realizó Amyts la semana pasada (el 85% se mostró a favor). No hay que olvidar tampoco el movimiento "Enfermería Unida Madrid", en este caso asindical, que tampoco descarta convocar paros y movilizaciones.
En cuanto a las reclamaciones de la Mesa Sectorial en su conjunto, denuncia que no ha avanzado en ninguno de los temas que quedaron en suspenso por causa de la epidemia.
Denuncian que la Consejería de Sanidad no ha hecho ningún gesto real para cumplir acuerdos como la recuperación de la jornada laboral de 35 horas semanales o la aprobación de la oferta pública de empleo (OPE) de 2020, "finalizando las convocatorias iniciadas, publicando las ya acordadas para el segundo semestre y avanzando en el resto de categorías y especialidades, así como convocando el concurso de traslados en todas las categorías profesionales".
Hay otras medidas también pendientes, como el desarrollo pleno de la carrera profesional y su abono al personal no fijo y las reconversiones de eventuales a interinos. También reclaman que se contraten a los 10.100 refuerzos de la pandemia de la Covid-19 como plantilla estructural.
Otra de sus reivindicaciones es la necesidad de realizar un plan de choque para atención primaria, que aseguran que está al borde del colapso. Entre otros aspectos, además de aumentar la plantilla y contratar a rastreadores, piden elaborar una estrategia de comunicación con la población, adecuar las horas de actividad asistencial, mejorar condiciones laborales y salariales, dotar a los sanitarios de medios tecnológicos adecuados, suprimir la burocracia no imprescindible, regular el teletrabajo y realizar PCR periódicas a los profesionales.
Además, está pendiente el abono de la productividad variable 2019. Los sindicatos piden que sea al 100% de cuantías y sin evaluación previa, "en reconocimiento a la labor desempeñada por todos los profesionales en esta crisis" y otra reclamación histórica: la creación de las bolsas únicas centralizadas de empleo en las categorías que actualmente no tienen este sistema -fundamentalmente de médicos de hospital-, así como el acuerdo sobre las convocatorias singulares.
Los sindicatos lamentan además que la Consejería de Sanidad y su Dirección de Recursos Humanos "siguen incumpliendo y vulnerando el derecho a la información, ya que no nos remiten la documentación acordada sobre la situación de los centros sanitarios, sobre los medios humanos y materiales. Se han vuelto a convocar reuniones cuando lo ha entendido imprescindible la Administración, manejando a su antojo las reuniones en cuanto a periodicidad, orden del día, tiempo, temas a tratar, etc."
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