Oficina Virtual GRATIS 2 MESES

Oficina Virtual GRATIS 2 MESES
CONSIGUE TU OFICINA VIRTUAL GRATIS

martes, 26 de enero de 2021

Subastas en Andalucía: regreso al futuro

Opinión
gemasuarez
Mié, 27/01/2021 - 08:00
Muerte anunciada
La campaña busca fomentar la notificación de sospechas de RAM tanto por parte de profesionales sanitarios como de ciudadanos.
La campaña busca fomentar la notificación de sospechas de RAM tanto por parte de profesionales sanitarios como de ciudadanos.

Nunca una vuelta atrás resultó un paso adelante tan relevante. El 28 de diciembre el Gobierno de Andalucía anunciaba la eliminación definitiva de las subastas y con ella el retorno al sistema anterior de compra de medicamentos. Con la supresión del artículo 60 de la Ley de Farmacia de Andalucía, se ponía fin (de forma definitiva, como pedíamos los farmacéuticos) a un modelo con mucho más inconvenientes y complicaciones que beneficios, tan problemático que ni una sola comunidad autónoma siguió la estela de Andalucía.  

Es por ello que, más que un regreso al pasado, la reversión de las subastas representa un regreso al futuro. Un avance en muchas direcciones. La más importante, la de los derechos de los pacientes andaluces, que recuperan la igualdad en la prestación farmacéutica con respecto a los del resto de España. Un avance, por tanto, también en equidad y cohesión territorial, al permitir que la prestación farmacéutica se desarrolle con las mismas reglas en toda España. Un avance en la autonomía del ejercicio profesional farmacéutico y en garantías de abastecimiento y en adherencia a los tratamientos. Y, por supuesto, un avance para las posibilidades de inversión en I+D y creación de empleo estable por parte de la industria en Andalucía.

Antonio Mingorance.
Antonio Mingorance.

Trataron de convencernos de que la subastas eran el futuro, pero afortunadamente se ha demostrado que fueron una involución y son ya el pasado en Andalucía, la única comunidad donde llegó a ser presente, un largo presente de ocho años al que por fin se ha puesto fin. Gracias a ello, los farmacéuticos hemos recuperado la gestión del medicamento que nos correspondía por Ley y los ciudadanos andaluces vuelven a ser de primera respecto a la prestación farmacéutica.

El futuro requerirá innovaciones, sin duda, pero esas no pasarán por la subasta, sino por medidas para un mejor seguimiento de los pacientes y un mejor aprovechamiento de los recursos del sistema. Entre ellos, de la farmacia y de los farmacéuticos, que siempre hemos estado dispuestos a comprometernos con la calidad y sostenibilidad del sistema sanitario.

Así lo estamos demostrando en estos meses críticos de emergencia sanitaria, en los que las farmacias andaluzas han actuado como dique de contención frente a la vulnerabilidad, para que a ningún paciente la faltara su tratamiento (crónicos y pacientes complejos, personas con dificultades de movilidad…) y para que todos los ciudadanos encontraran la cercanía y seguridad de tener un profesional sanitario accesible a menos de 200 metros de sus casas.

El futuro, pues, de la prestación farmacéutica, en Andalucía y en toda España, no debería pasar por políticas cortoplacistas de ahorro que conllevan más gasto y problema que ahorro y soluciones. El futuro pasa por una farmacia más asistencial y más integrada dentro del sistema sanitario, con mayor comunicación con el resto de niveles y actores sanitarios y particularmente con la Atención Primaria, y con más y nuevas prestaciones farmacéuticas encaminadas a mejorar la adherencia a los tratamientos y el seguimiento de los pacientes crónicos y polimedicados.

Ojalá el debate se encauce en esa dirección y dejemos atrás ya para siempre las subastas. Necesitamos en España debates constructivos, colaboración público-privada, diálogo y suma de esfuerzos por el interés común. Las subastas representan lo contrario y fueron, por así decirlo, con respecto a la compra y acceso de medicamentos, un paréntesis, una imposición sin consenso alguno, y una involución que espero que no se vuelva a repetir en Andalucía y que no deseo naturalmente a ninguna otra comunidad española.  

El Estado social y de derecho español es más social y más de derecho con las mismas posibilidades de acceso al medicamento por parte de todos los españoles, y sin sistemas de compra que perjudiquen el abastecimiento y la continuidad y adherencia de los tratamientos. Trabajamos para mejorar y profundizar los derechos sociales de todos los españoles. Los farmacéuticos estamos dispuestos a ello.

Off Antonio Mingorance, presidente del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales Farmacéuticos. Farmacia Comunitaria Off

via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/3iNN12B

No hay comentarios:

Publicar un comentario