Esta semana la consejera de Salud de La Rioja, María Somalo, ha participado en la Comisión Asesora Técnica para el Uso Racional del Medicamento, celebrada en el Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR), con el objetivo de exponer el Plan de acción que se está implementando en la comunidad para fomentar el uso racional del medicamento entre profesionales sanitarios de Hospitalización y Atención Primaria.
Aun así, La Rioja presume de tener un incremento interanual del gasto farmacéutico que supone casi la mitad del registrado como media por las comunidades autónomas. Atendiendo a los datos totales de facturación de recetas médicas del Sistema Nacional de Salud (SNS), a fecha de 2021, el incremento medio nacional subió un 4,37% respecto a 2020, mientras que en La Rioja fue de 2,84, según el Ministerio de Sanidad. Sin embargo, el incremento interanual de gasto farmacéutico fue similar, según fuentes ministeriales: una media nacional de 5,89% y un aumento en La Rioja de 5,25%.
Para 2022 cuenta con un presupuesto de unos 81 millones de euros con destino al gasto farmacéutico de medicamentos de dispensación en oficina de farmacia (en 2021 el gasto farmacéutico fue de 80.637.658 euros). Tal y como ha puesto en valor Somalo, “esto es así gracias a que desde la Dirección General de Humanización, Prestaciones y Farmacia se trabaja con intensidad en la promoción de la cultura del uso racional del medicamento”.
Según ha explicado la titular de Salud, “hay pacientes que tienen un exceso de medicación innecesaria con efectos perjudiciales, porque interacciona y aumenta la toxicidad”. “Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) promueve que cada paciente tenga los fármacos que necesite para mejorar su salud y su calidad de vida, al menor costo posible para ellos y la comunidad, y para alcanzar estos objetivos estamos trabajando con intensidad desde el Gobierno de La Rioja”, ha declarado Somalo, que detalló también que se trata de una "estrategia colaborativa, ordenada y coordinada" en la que se trabaja a nivel de la prescripción médica, con los médicos de Atención Primaria y con los especialistas.
En el caso de patologías crónicas, se aconseja prescribir envases con mayor número de unidades, al ser menos costosos
Por su parte, el director general de Humanización, Prestaciones y Farmacia, Gonzalo Aparicio Rodríguez, ha asegurado que “es una prioridad para nosotros que, entre todos, profesionales, ciudadanos y cuidadores, contribuyamos a un uso racional del medicamento y por eso hemos diseñado un plan que nos permita ser más eficientes”.
Para lograr el objetivo, “se ha creado una Unidad del Uso racional del medicamento que tiene como fin ayudar a los médicos a dirigir la terapia a los medicamentos más eficientes, evaluar e informar sobre la eficacia de nuevos fármacos y revisar también el posible exceso de recetas y su cronificación innecesaria”, ha explicado Aparicio. Puso también como ejemplo algunas medidas de eficiencia en el gasto, como las que se recomiendan en el caso de patologías crónicas, para las que se aconseja prescribir envases con mayor número de unidades dado que resultan menos costosas.
Aparicio ha subrayado que el uso racional del medicamento mejora la salud y la calidad de vida del paciente, promueve el control del gasto farmacéutico y, además, impacta en el gasto sanitario asistencial. “Por eso creemos tanto en ello y en la necesidad de instaurar una cultura del uso racional de los medicamentos, de la eficiencia, haciéndolo a través de un trabajo profesional interdisciplinar, que implique también al paciente, a sus familiares y cuidadores”, ha señalado.
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