Un total de 423 médicos de Familia de Mallorca han estampado su firma en un documento de consenso que han hecho llegar a la Consejería de Sanidad de Baleares, en el que piden la adopción de medidas urgentes para atajar la "agónica" situación que vive el primer nivel, en Mallorca en concreto, y en toda la comunidad en general. Los 423 médicos firmantes representan aproximadamente al 85% de los médicos de primaria que ejercen actualmente en la isla y las firmas se han recogido en 44 de los 46 centros de salud censados en Mallorca. La iniciativa, respaldada por el Sindicato Médico de las Islas Baleares (Simebal), se extenderá esta semana a los centros de salud de Menorca e Ibiza, según las delegaciones de Simebal en ambas islas.
"Ante la falta de respuesta de la Gerencia de Atención Primaria de Mallorca, que, una vez más, ha demostrado su incapacidad para atender las inquietudes, solicitudes y quejas de sus médicos, los coordinadores de prácticamente todos los centros de salud de Mallorca han optado por dirigir sus propuestas directamente a Patricia Gómez. El hecho de que el texto haya sido firmado nada menos que por 423 facultativos evidencia el hartazgo de estos profesionales, que es similar al que existe en el resto de la comunidad", afirma Gorka Iriarte, vocal de Primaria de Simebal.
El documento que la consejera ya tiene en sus manos plantea hasta 12 medidas "para paliar la saturación de las consultas de atención primaria y mejorar la calidad asistencial que reciben nuestros pacientes", pero Iriarte las resume en tres, que, a su juicio, contienen la esencia de la propuesta. "El primer e ineludible paso es la activación de un plan de choque urgente, con una reestructuración horaria de las consultas de primaria, dada la inexistencia de personal sustituto", apunta Iriarte.
En línea con esta primera propuesta, Simebal y la Administración acaban de firmar un documento para incrementar en un 50% la retribución que perciben los médicos de Familia que, voluntariamente, deciden prolongar su jornada de trabajo por la tarde para asumir el cupo de un compañero o aligerar las listas de espera de su área de salud, los llamados módulos de actividad extraordinaria (MAES). Aunque el sindicato firmó este acuerdo a mediados de junio, ya advirtió en su momento de que esta mejora salarial no era más que "un parche" para solventar el problema estructural de déficit de médicos, especialmente acuciante durante el verano.
"Un hecho absolutamente demostrado e incontrovertible es que faltan médicos de atención primaria, y ese hecho no solo se manifiesta en la dificultad para encontrar sustitutos para los centros de salud durante los meses de verano en todas las islas, sino que es un problema estructural. En los próximos cinco años se jubilarán entre 120 y 140 facultativos, y de los 29 médicos de Familia que se han titulado este año en las unidades docentes MIR de Baleares solo se han quedado a trabajar aquí siete", asegura Alfonso Ramón Bauzá, secretario general de Simebal.
Reclaman agendas médicas con un máximo de 25 consultas diarias
La segunda de las 12 medidas que Iriarte destaca del documento que los médicos de Mallorca han remitido a la consejera es "la necesidad de diseñar unas agendas médicas con un máximo de 25 consultas por jornada, y sin posibilidad de forzarlas. Esto garantizaría la calidad del servicio, la correcta atención a nuestros pacientes y la planificación adecuada de la atención domiciliaria". Bauzá remacha que el hecho de forzar las agendas "es práctica habitual en muchos centros".
En tercer lugar, el documento que ha firmado el 85% de los médicos de Familia de Mallorca aboga por una "implantación real y evaluable de la gestión compartida de la demanda asistencial en atención primaria, para conseguir una mejora real en la distribución de las tareas por los diferentes estamentos y categorías".
Más allá del contenido del documento, el vocal de Primaria de Simebal insiste en la inusitada unanimidad que la iniciativa ha generado entre los profesionales: "Yo llevo más de 25 años ejerciendo en la isla y nunca había vivido una situación como la que atraviesa actualmente la atención primaria, y tampoco había visto nunca el histórico consenso que ha generado esta iniciativa para pedir amparo a la consejera. La situación del primer nivel es dramática y, si no se hace algo para revertirla de manera urgente, será aún peor para los profesionales y los pacientes".
La semana pasada, sin ir más lejos, Simebal denunciaba que de los 1.541 contratos sanitarios estivales anunciados por la consejería para reforzar las plantillas durante los meses de verano, solo 33 corresponden a médicos de primaria, una cifra que el sindicato considera "ridícula y desoladora para cubrir las necesidades asistenciales de los 59 centros de salud y más de 90 unidades básicas, servicios de urgencia de primaria y puntos de atención continuada de las islas".
Los 'liberados' sindicales, a consulta
El sindicato recuerda, además, que, según los datos oficiales de la propia Administración, en los últimos meses ha habido una paulatina disminución de la contratación temporal, que ha sido de más del 60% en poco más de 8 meses. Concretamente, se ha pasado de los 200 médicos temporales contratados en octubre de 2021 (para cubrir, entre otras cosas, necesidades derivadas de la pandemia) a los 80 facultativos contratados el pasado mayo. "Era obvio que con esta reducción de las contrataciones temporales se auguraba un verano asfixiante", apuntan desde Simebal.
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