
¿Se acuerda? Fue Contagio (2011) dirigida por Steven Soderbergh, con Matt Damon, Jude Law, Kate Winslet y Gwyneth Paltrow, la ficción que mejor predijo la llegada del SARS-CoV-2, y fueron varios los títulos que compitieron por esa capacidad premonitoria de la covid. También de un virus exterminador hablan Epidemia (Outbreak, 1995) de Wolfgan Peterson con Dustin Hoffman y Morgan Freeman; Virus (Gamgi, 2013), del coreano Kim sung-su y otro Virus (2019), una película india de Aashig Abu.
Pero, a estas alturas del milenio, estos títulos hablan más del pasado que del futuro y, ahora, en este reportaje de verano, queremos abrir una ventana al futuro, hacia el que vamos empujados por una investigación biomédica ¿imparable?
"Si cambias la actividad cerebral desde dentro, entonces, cambias a la persona y eso debería estar protegido". Lo ha dicho Rafael Yuste, neurobiólogo, profesor de Ciencias Biológicas en la Universidad de Columbia, Nueva York, y responsable del Proyecto Brain. El debate es viejo o, mejor dicho, es un dilema constante: poner límites a una investigación médica que puede llegar a crear humanos que poco o nada tienen que ver con nosotros, lo que ahora, en este comienzo de milenio, poblamos el planeta Tierra. Pero, ¿a caso tenemos nosotros algo que ver con los que hombres -como término genérico de nuestra especie- que pisaron este suelo hace mil años?
Dilemas legales y bioéticos están servidos en las seis ficciones propuestas para debatir sobre ese futuro que ya está aquí y sobre el que es obligado reflexionar como ciudadano, científico, médico, gestor, político... No se libra nadie.
Gattaca (1997) Andrew Niccol con Ethan Hawke y Uma Thurman. El ADN determina las capacidades del ser humano y en el futuro que describe el film nada se deja al azar. Los nacimientos son frutos de una selección genética y se convierte en una inconsciencia no utilizar esas técnicas, porque el niño nacería en una situación de desventaja con respecto al resto y se le limitaría su ascenso. La película muestra la discriminación por razón de ciencia y el peligro de los propósitos eugenésicos. ¿Estamos muy lejos de este futuro?
La película abre el debate sobre los posibles "derechos" de los robots, la posibilidad de crear una inteligencia artificial consciente y la relación del hombre con estas e-personalidades. Un futuro muy inquietante, que la película traslada muy bien, con un ambiente sofocante donde la mente humana se expone a la manipulación de sus sentimientos por parte de un robot.
Nunca me abandones (2010), Mark Romanek, con Carey Mulligan, Andrew Garfield, Keira Knightley y Charlotte Rampling. El "bebé medicamento" llevado a los últimos extremos. La película muestra a seres humanos creados a partir de intervenciones de biotecnología: clonación y manipulación genética para ser utilizadas para trasplantes de órganos cuando, sus clones, comiencen a tener problemas de salud. En definitiva, son piezas de sustitución para un grupo de humanos pudientes que se niegan a envejecer.
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/3CZ5aGu
No hay comentarios:
Publicar un comentario