Los médicos de Canarias irán a la huelga en la recta final de la campaña de las elecciones del 28M si el gobierno autonómico no acuerda con ellos medidas retributivas que puedan paliar la falta de especialistas en las islas. La huelga comenzará el viernes 19 de mayo y, de no conseguir soluciones, se prolongará desde el 22 al 25 de mayo. Y de no obtener resultados satisfactorios, "convocaremos una huelga al nuevo gobierno que salga de las elecciones", apunta el secretario general de CESM en Tenerife.
CESM considera que se han dado "múltiples oportunidades a la Administración para negociar con nosotros y que han sido respondidas con evasivas e indeterminación en las medidas".
Por este motivo, "rechazamos como interlocutora a la directora del Servicio Canario de la Salud, y emplazamos al presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, a la negociación, como único interlocutor válido en las circunstancias actuales".
Inicialmente, la huelga de CESM Canarias estaba prevista para el 8 de mayo. Reivindicaban diferentes mejoras para los facultativos, como la limitación de agendas en atención primaria (en 30 y 25 pacientes para Médicos de Familia y Pediatras en lugar de los 34 y 28 actuales), aumento del precio de la hora de guardia para adjuntos y residentes y del pago de la carrera profesional, entre otros.
Pocos días antes, según relata Cabrera, les convocaron para una Mesa Sectorial y, como gesto de buena voluntad, dejaron la huelga en suspenso. De esa mesa nació un acuerdo con seis puntos bastante genéricos para enunciar distintos grupos de trabajo que se iban a crear para mejorar las condiciones de los trabajadores del Servicio Canario de Salud (SCS).
El acuerdo se refiere a mejoras en materia de aumento de plantillas orgánicas y adecuación a las necesidades, especialmente de Enfermería Familiar, pediátrica y Salud Mental; creación de concurso abierto y permanente una vez cerrado el proceso de estabilización; revisión del manual de permisos para garantizar tratamiento homogéneo y acuerdos para el desarrollo y ejecución de las listas de empleo.
Sin embargo, a finales de mes terminan 300 MIR y CESM considera clave poner en marcha concretar las medidas retributivas para médicos con el fin de fidelizarlos, pero también atraer a otros especialistas. "Nos consta que un 70% tienen planes de irse fuera o a la privada. No podemos esperar a después de las elecciones", asegura Cabrera. La situación es especialmente preocupante en primaria, donde estiman que un 20% de las plazas en la práctica están ocupadas por médicos generalistas sin la especialidad.
Off Nuria Monsó. Madrid Off
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