Ninguna novedad con respecto a lo que el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) llevaba anunciando desde el pasado mes de mayo. La diferencia es que ahora se reviste de anuncio oficial y, como tal, vendible: los más de 11.100 contratos firmados en el Sermas desde marzo de 2020 seguirán trabajando en la comunidad hasta el próximo 31 de diciembre. De momento, ni un día más, pese a las reiterada y unánime petición de los sindicatos de la mesa sectorial de que todos -o al menos parte- de esos contratos entren a formar parte de la plantilla estructural del Sermas.
La reticencia a incluir esos contratos en la estructura orgánica de los servicios de salud no es exclusiva de la Comunidad de Madrid. Como adelantó DM, sólo tres comunidades (Navarra, Murcia y Asturias) han accedido, de momento, a incluir parte de esos contratos en su plantilla estructural, y entre las tres apenas suman 4.798 nuevos nombramientos. El resto de los más de 90.000 contratos que las comunidades han firmado desde marzo de 2020 para afrontar las consecuencias de la pandemia podrían extinguirse, en el mejor de los casos, en diciembre.
Madrid llevaba semanas anunciando que la renovación semestral de sus contratos covid -que prácticamente se daba por hecha- dependía de la puesta en común con el Sermas de los planes específicos de los centros con vistas a los próximos meses. Pues bien, fruto de esas reuniones nace el Plan Funcional de Recursos Humanos 2021, que estará en vigor hasta el último día del año y que, según fuentes de la consejería, sirve para dar respuesta a "las necesidades surgidas en los diferentes centros en todos sus niveles: hospitales, centros de salud y SUMMA 112".
María Justicia López, responsable del Sector de Atención Primaria del sindicato Amyts, niega la mayor. Según ella, las "necesidades surgidas" en los centros de salud apenas se han cubierto con los refuerzos específicamente contratados para la covid, "porque el grueso de esas contrataciones ha sido para atención hospitalaria". López recuerda que el problema de recursos humanos en primaria es "estructural e histórico" y se sustancia en las más de 800 plazas vacantes, entre Medicina de Familia y Pediatría, "que hay ahora mismo en los centros de salud, y que el propio Sermas reconoce, y en el déficit estructural de facultativos del primer nivel que habría que sumar a esas vacantes", y que el sindicato profesional cifra en más de 600.
En la misma línea, UGT-Madrid recuerda que la plantilla estructural de atención primaria en la Comunidad de Madrid está formada actualmente por algo menos de 15.000 profesionales sanitarios, incluyendo al medio millar de rastreadores que se contrataron en noviembre de 2020 para la covid. De esos 15.000 profesionales, algo menos de 2.000 están ya por encima de los 60 años y 222 superan los 65, según los responsables de Sanidad del sindicato.
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El plan de primaria que ha puesto sobre la mesa el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso prevé una inversión de algo más de 82 millones de euros y la contratación de 1.200 profesionales en un plazo de tres años. Según UGT-Madrid, la propuesta de la consejería que dirige Enrique Ruiz Escudero para la mejora del primer nivel asistencial "ni siquiera aporta los recursos mínimos imprescindibles para equipararnos con otras comunidades autónomas y es claramente insuficiente para la cobertura de las necesidades asistenciales de la población". Los sindicatos de la mesa sectorial llevan meses pidiendo a la Consejería de Sanidad y al Sermas que aprovechen los refuerzos covid para aumentar esas previsiones de contratación.
Según el desglose que ha hecho público hoy el Sermas, las 11.100 contrataciones que el Sermas prorrogará durante seis meses más incluyen a 1.102 facultativos, de diferentes especialidades médicas, 4.722 contratos de Enfermería y 3.309 técnicos en cuidados auxiliares de Enfermería. A ellos habría que sumar diferentes categorías sanitarias, como fisioterapeutas, técnicos especialistas en Laboratorio de diagnóstico clínico, radiodiagnóstico o higiene bucodental y auxiliares de Farmacia, así como diferentes categoría de personal de servicios (no sanitarios).
¿Contratos MIR?
Dentro de ese mismo Plan Funcional se contempla la posibilidad de ofrecer contratos a los especialistas en formación que finalizaron en mayo su residencia en unidades docentes de Madrid, con el objetivo de dar cobertura a "los nombramientos que han sido autorizados y que, por diversas causas, en este momento no están cubiertos". Lo que no específica el plan es cuántos contratos se ofertarán a los MIR ni de que naturaleza y duración serán esos contratos.
Con respecto a los MIR, la representante de Amyts recuerda el "absoluto fiasco" que han supuesto los contratos que Recursos Humanos ha puesto sobre la mesa para los residentes de Familia y Pediatría, y puntualiza que "a tenor de esa desastrosa experiencia, si los contratos que se ofrecen son pocos y de mala calidad, los especialistas recién formados preferirán irse a otras comunidades, por mucho que la consejería elabore grandilocuentes planes funcionales".
De los 224 MIR de Familia que terminaron su residencia en Madrid en mayo, sólo 17 han optado por firmar uno de los 90 contratos que la consejería había ofertado para ellos. En el caso de Pediatría, el número es aún más irrisorio: sólo 5 de los 76 pediatras recién formados en centros de la comunidad se han acogido a alguno de los 45 contratos ofertados por el Sermas.
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