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viernes, 15 de abril de 2022

Cuándo y cómo recomendar fotoprotectores orales en la farmacia

Autocuidado
gemasuarez
Vie, 15/04/2022 - 08:00
Ricos en antioxidantes
Los fotoprotectores solares se podrían tomar todo el año, pero es mejor usarlos en función de la exposición y de otros condicionantes. Foto: LUIS CAMACHO.
Los fotoprotectores solares se podrían tomar todo el año, pero es mejor usarlos en función de la exposición y de otros condicionantes. Foto: LUIS CAMACHO.

Según la sexta edición del Observatorio Heliocare, de Cantabria Labs, en su último informe sobre hábitos de la población frente al sol, presentados a finales de marzo en Madrid, el 76% de los encuestados dice que conoce qué es un fotoprotector oral frente a un 61% que así lo afirmaba en el estudio anterior (de 2020). De ese 76%, un 20% dice que lo toma y un 56%, que no. 

Con estos datos sobre la mesa, CF ha hablado con farmacéuticos y con la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) para preguntarles cuál es el papel real de los fotoprotectores orales en el cuidado que hay que tener frente al sol, qué estudios hay detrás que respalden su eficacia para saber cuándo y cómo recomendarlos desde la farmacia y cuál es el fotoprotector oral ideal. 

Yolanda Gilaberte, vicepresidenta 1ª de la AEDV, afirma que los fotoprotectores orales son "un complemento perfecto" de otros hábitos imprescindibles frente al sol, como son aplicar cremas solares y el empleo de ropa adecuada, gorros y gafas de sol. Pero remarca que únicamente son un complemento, puesto que estos productos solo tienen un factor de protección solar (FPS) 4 y "con esto te quemas", advierte la dermatóloga, quien, aunque reconoce que "sube la dosis eritomatosis mínima, no evita la quemadura solar".

Por otra parte, subraya que no hay ensayos clínicos como tal con fotoprotectores orales "o son muy escasos y con muy poquitos pacientes", matiza: "Hay algún trabajo centrado en la prevención de hiperpigmentaciones y erupción solar polimorfa, pero, realmente, no llegan a ser ensayos clínicos, y no han demostrado que te quemes menos o tengas menos cáncer de piel".

No obstante, apunta que hay "muchísimos estudios in vitro y en animales que han demostrado que, como tienen antioxidantes, previenen la formación de los radicales libres, que induce la luz solar, o que protegen frente al daño en el ADN que provoca la radiación ultravioleta A y B, y parece que disminuyen otros trastornos como la hiperpigmentación".  

Y por esta composición, la dermatóloga apoya "que son un buen complemento de la fotoprotección tópica". 

María Vitale, dermatóloga y directora médica de Cantabria Labs, asegura que usar fotoprotectores orales como complemento a los tópicos está justificado porque "las cremas solares se quedan cortas". Y da varios argumentos: "Hasta el 45% de la radiación solar consigue atravesar nuestra piel incluso usando filtros solares, lo que puede generar un exceso de radicales libres que pueden provocar daño en nuestras células". 

Por otra parte, afirma que como los propios mecanismos de defensa antioxidante del organismo para neutralizar los radicales libres no son suficientes, "es necesario agregar sustancias antioxidantes", como las que tienen los fotoprotectores orales. 

Asimismo, defiende que el daño en el ADN de las células se sigue produciendo hasta tres horas después de la exposicion solar, "por eso es importante usar fotoprotectores específicos que ayuden a reparar y evitar el daño".   

Precisamente, Gilaberte menciona algunos trabajos que apuntan que algunas sustancias de los fotoprotectores orales previenen la presencia de dímeros en la oscuridad. "Cuando acaba la exposición al sol uno piensa que se ha acabo el daño que se puede producir en la piel, pero se ha comprobado que, tras la exposición, se siguen produciendo dímeros, que es el daño en el ADN originado por el ultravioleta A. Aquí se ha visto que los fotoprotectores orales ayudan a prevenir los dímeros", explica.

Isabel Ruiz Nebrera, vocal de Dermofarmacia del COF de Jaén, tiene claras cuáles son las acciones de los fotoprotectores orales, que resume en "inhibición del daño celular a nivel de ADN; disminución del estrés oxidativo causado en las células por la acción de los radicales libres que causan el envejecimiento de la piel; mejoran la respuesta inmunológica en personas que reaccionan al sol de manera inmune, y disminuyen el eritema o enrojecimiento de la piel". 

Cremas mal aplicadas 

Blanca González, vocal de Dermofarmacia del COF de La Coruña, da más argumentos para recomendar los fotoprotectores orales desde la farmacia. "La fotoprotección tópica se imagina como un escudo perfecto frente al sol, pero no es así, por varias razones: no se aplica ni la cantidad ni las veces que deberíamos, es habitual que olvidemos aplicarla en alguna zona como las orejas, empeines, cuero cabelludo... Además, los fotoprotectores, aunque cada vez son más evolucionados, no bloquean nunca el cien por cien de la radiación ni tampoco de los radicales libres; de hecho, hay estudios que en los que se muestran que lo hacen en un 50%".

En su opinión, los fotoprotectores orales "al ser un complemento oral su protección la va a hacer desde el interior y se va a distribuir por toda la superficie, incluidas mucosas". 

De la misma opinión es Isabel Ruiz Nebrera, vocal de Dermofarmacia del COF de Jaén. "Aplicar la crema solar no es fácil, pueden quedar zonas sin cubrir. Además, calcular la cantidad de producto recomendada es complicado. Hay también ocasiones en las que no se reaplica correctamente o que se pierde a causa del sudor o del arrastre del fotoprotector con la ropa. Todo esto reduce la protección real frente al sol", expone.

Pacientes con patologías

Aunque pudiera pensarse que los pacientes con cáncer son las principales dianas para la recomendación de fotoprotectores orales, la dermatóloga reconoce que "no hay estudios que digan que estos pacientes se van a beneficiar más de ellos", porque, como ha expuesto, "no hay estudios que demuestren que previene el cáncer de piel". 

Dicho esto, afirma que ella los recomienda a personas con cáncer de piel que tienen la piel clarita y se queman con facilidad, "pero si su fototipo no es muy bajo, solo por la prevención del cáncer de piel no se recomienda porque no hay evidencia". 

Sin embargo, la vocal de La Coruña defiende que los pacientes oncológicos "toman una medicación muy fotosensibilizante y su piel se transforma en muy sensible, por ello, con los fotoprotectores orales proporcionamos un extra de protección".

Ruiz Nebrera apunta que se pueden recomendar a personas con condiciones especiales o enfermedades que precisan extremar la fotoprotección, entre ellas, "melasma, rosácea, dermatitis  atópica, pieles muy claras, con manchas o reactivas y a las que quieren prevenir el fotoenvejecimiento causado por el sol".

Respecto a si es recomendable que lo tomen los niños, la dermatóloga dice que depende de su riesgo. "Si tienen un fototipo muy claro y tienen antecedentes familiares de cáncer de piel o muchos nebus melanocíticos -aclara-, sí los recomendamos para reforzar su fotoprotección".  

La vocal de Dermofarmacia del COF de La Coruña cree que sí es bueno su uso en población infantil, porque "su piel es más inmadura y, además, se estima que el 80% del daño solar se produce en la infancia". A esto añade que "los niños están mucho tiempo al aire libre, todos sabemos que la aplicación y reaplicación del fotoprotector en ellos es complicada, por no hablar de que entran y salen del agua constantemente, se revuelcan por la arena, etc.  Si ya son un poco mayores y ellos mismo se aplican la crema, porque no estamos con ellos, es habitual que se olviden de esas zonas como orejas, empeines.. Con estos complementos la protección será más integral".

Por su puesto, Gilaberte subraya que hay que elegir la dosificación adecuada y la mejor forma farmacéutica, descartando las cápsulas y comprimidos, optando por los polvos para disolver.

¿A diario o todo el año?

Preguntados los expertos si desde la farmacia se debe recomendar su uso todo el año o no, la mayoría ha coincidido en responder que depende. González resalta que se pueden usar durante todo el año, pero hay que tener en cuenta muchas variables, por ejemplo, "lugar donde vivamos, tiempo de exposición, nuestros hábitos, estado y preocupaciones de la piel, patologías y medicación". Por tanto, sostiene que, en muchas situaciones y pacientes, "será buena idea tomarlos todo el año y otros será suficiente en los momentos en los que la exposición sea mayor", algo que refrenda Gilaberte.

Ruiz Nebrera insiste en que "está indicada desde los momentos de exposición intensa, como es el caso del verano, hasta su uso continuo durante todo el año".

El fotoprotector ideal 

La pregunta que surge a continuación es ¿qué debe tener un fotoprotector oral para que sea completo? La vocal del COF de Jaén enumera cuáles son los activos que suelen llevar, entre ellos:

  • Betacarotenos, licopeno y provitamina A, que protegen la piel frente a la radiación solar, ya que estimulan la síntesis de melanina (primera barrera protectora frente al sol) y favorecen un bronceado saludable.
  • Luteina, que protege la mucosa ocular.
  • Vitamina C, tocoferol y polifenoles, que minimizan la formación de radicales libres.
  • Extractos vegetales, como catequinas de té verde, cuyos polifenoles neutralizan los radicales libres y refuerzan la piel protegiéndola frente al eritema; polypodium leucotomos, variedad de helecho con propiedades inmunoprotectoras antioxidantes, protectoras del ADN y de prevención del fotoenvejecimiento celular, y extractos de granada y uva.
  • Niacinamida, N-acetilcisteina y probióticos, que salvaguardan las defensas de la piel, por su acción inmunofotoprotectora.

Para González, el fotoprotector oral ideal debe ser "seguro, eficaz y adaptarse a las necesidades y gustos del usuario para asegurarnos su adherencia".

Preguntas básicas

Como en cualquier recomendación farmacéutica, a la hora de decidir si recomendar o no un fotoprotector oral es importante saber hacer las preguntas clave al usuario. Según las vocales de Dermofarmacia, estas son las básicas y que ayudarán en la decisión final: 

  • ¿Tiene la piel sensible o padece algún tipo de alergia?
  • ¿Tiene la piel sana, pero hay antecedentes de cáncer de piel en su familia?
  • ¿Quiere prevenir la aparición de manchas y el envejecimiento cutáneo?
  • ¿Realiza algún tipo de actividad al aire libre? ¿Está expuesto a la radiación solar en playa o montaña?
  • ¿Tiene posibilidad de reaplicar la crema solar cada dos horas?
  • ¿Hay sudoración excesiva, contacto con toallas o ropa o baños frecuentes que eliminan la crema solar?
  • ¿Toma algún medicamento fotosensible?
  • ¿Padece alguna patología de la piel: dermatitis a tópica, rosácea, lupus, etc.?
  • ¿Qué le preocupa de la piel? 
  • ¿Cuál son sus gustos
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El 76% de la población sabe qué son estos productos, pero, ¿son efectivos frente al sol? Expertos dicen que, aunque faltan estudios, son un buen complemento. Off Gema Suárez Mellado. Madrid Farmacia Comunitaria Autocuidado Off

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