Se estima que las reacciones adversas a los medicamentos son responsables de hasta un 30% de los ingresos hospitalarios en pacientes mayores. Las principales causas, los usos inadecuados (más tiempo, mayores dosis de las indicadas o no tener en cuenta posibles interacciones con otros fármacos....). Para atajar este problema, la Consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana ha diseñado una estrategia integral para adecuar los tratamientos farmacológicos en mayores de 65 años que toman más de cinco medicamentos durante, al menos, seis meses -en la actualidad, 468.921 personas o el 9,8% de la población total-. El objetivo: optimizar la eficacia de los tratamientos y vigilar su seguridad.
En este escenario, la Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios de Sanidad comenzará este año identificando y revisando la farmacoterapia de las personas de 75 o más años que toman más de diez fármacos, para progresivamente alcanzar a toda la población polimedicada. Según han señalado a CF fuentes de la Dirección General, “el programa se mantendrá en las aplicaciones informáticas de forma definitiva, y a partir de 2025 se podrá implementar en toda la población general polimedicada”, aunque no han especificado a partir de cuándo se podrán conocer los primeros resultados.
Para acometer este proceso, se ha previsto emprender acciones en todos los niveles asistenciales e implicar tanto a profesionales como a pacientes.
Para el personal sanitario, se ha redactado una guía, que indica aquellos medicamentos susceptibles de optimizar mediante reducción de dosis, sustitución por otro principio activo o suspensión si es preciso. También contempla la adición de aquellos medicamentos esenciales para personas mayores que no estén prescritas y se han activado alertas -avisos que advierten de combinaciones farmacológicas desaconsejadas o de la tasa de adherencia al tratamiento- en los programas informáticos-. La guía es la publicada como inicio de la estrategia “y las alertas se implementan en las herramientas informáticas (módulo de prescripción MPRE) de la Consejería de Sanidad”, apuntando que “las ven todo los profesionales sanitarios al prescribir”.
Fuera los farmacéuticos comunitarios
Desde Sanidad apuntan que el papel de los farmacéuticos de Atención Primaria y hospitalaria es esencial en “la estructura de adecuación de tratamientos y de la conciliación de los mismos al alta hospitalaria o en las transiciones por el sistema sanitario”.
En cambio, los farmacéuticos comunitarios “no acceden a este proyecto”, aunque desde la Dirección General de Farmacia se incide, sin especificar, que “estamos desarrollando acciones” para su colaboración “en cuanto a la mejora de la seguridad de nuestros pacientes”.
Tampoco se descuidan las vertientes formativa e informativa, puesto que se han programado sesiones y cursos para el personal sanitario, así como publicaciones de distinta periodicidad. Para la ciudadanía también se han previsto charlas divulgativas y se utilizará el canal de difusión MedicamenTIC.
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