Hace ahora dos años que una veintena de científicos y expertos sanitarios de primer nivel entre los que figuraban nombres como el de la viróloga Margarita del Val, el asesor de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Rafael Bengoa, la economista Beatriz González-López Valcárcel o el ex director general de Salud Pública, Ildefonso Hernández, firmaron una carta en la revista The Lancet reclamando una evaluación “independiente e imparcial” de la gestión de la pandemia, sin vocación de reproche político sino de aprendizaje para afrontar lo que todavía estaba (y está) por venir. Gobierno y autonomías tardaron todavía un año más desde aquel momento en consensuar la lista de los cuatro nombres encargados de coordinar el trabajo. Entre ellos está el de Rosa Urbanos, presidenta de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS).
Urbanos reconoce que todavía estamos lejos de poder leer ese informe sobre la gestión de la pandemia: “Es un trabajo complejo que se ha retrasado por distintos motivos y aunque esperábamos poder tenerlo a finales de este año probablemente no estará listo hasta principios del próximo año”.
A la espera de esa evaluación oficial, sin embargo, SESPAS acaba de publicar su informe anual, dedicado a las lecciones aprendidas de la pandemia. “Son dos trabajos distintos. En el informe de SESPAS hemos tenido que hacer una selección de temas y en la evaluación haremos un recorrido más sistemático, ordenado y completo, pero desde luego este informe es ya una pieza importante en el trabajo que haremos porque proporciona ya artículos científicos que nos permiten extractar algunas lecciones aprendidas y líneas de reforma que debemos emprender”, explica Urbanos..
Entre ellas, el informe apunta ya que la pandemia ha revelado “carencias en la calidad de la democracia y en la confianza en los políticos”, además de “errores en comunicación como la difusión de mensajes demasiado tranquilizadores al inicio, la falta de transparencia o el exceso de información”.
"La pandemia nos ha enseñado que necesitamos reformas y las necesitamos ya"
El estudio de lo sucedido durante la pandemia deja claro que “necesitamos reformas y las necesitamos ya”, explica Urbanos.
Y entre esas reformas resulta imprescindible como mínimo una reforma legal para disponer de una ley de pandemias “ajustada al modelo de sanidad descentralizada”, integrar la salud pública en los niveles asistenciales y desarrollar un nuevo sistema de gobernanza a través de la Agencia Estatal de Salud Pública. Además, la atención primaria necesita más dotación presupuestaria, capacidad de resolución, autonomía de gestión y prestigio. Y el sistema de cuidados de larga duración, “que ha mostrado su fragilidad”, necesita más financiación y nuevos modelos habitacionales alternativos.
PREGUNTA: ¿Cuál es la gran lección aprendida de la pandemia?
RESPUESTA: Es complicado dar una lección general. La más evidente es que se necesita un trabajo multidisciplinar porque esto no ha concernido sólo a la parte más sanitaria sino que ha tenido efectos importantes en la economía. Y una de las cuestiones que se dicen en el informe, por ejemplo, es que uno de los grandes aciertos de la pandemia fue la aprobación del ingreso mínimo vital y de los ERTES, porque esto es lo que dio oxígeno y permitió gestionar mejor los efectos de la pandemia. Una de las cuestiones que hemos aprendido es la fortísima relación entre la salud y la economía.
P: ¿Y cómo evitar que esa relación entre salud y economía acabe en enfrentamiento?
R: Hemos aprendido que necesitamos un abordaje multidisciplinar y coordinar a un grandísimo número de actores y que los mecanismos de coordinación estén muy bien engrasados porque sino es imposible gestionar una crisis como ésta. Y esa coordinación debe darse a todos los niveles: con las agencias europeas, entre líderes de gobierno dentro del país, entre distintos centros sanitarios, entre redes de investigación, entre investigadores e industria, entre profesionales y pacientes. Esa es otra de las grandes lecciones: o hay coordinación y los mecanismos están bien engrasados o se hace muy difícil dar una respuesta sensata al problema.
“Lo que la pandemia nos ha enseñado es que necesitamos reformas y las necesitamos ya”
P: ¿Hace falta reformar alguna norma para garantizar esa coordinación “entre todos los actores”?
R: Uno de los artículos del informe hace referencia a que necesitamos una nueva ley de pandemias. Habría que modificar tanto la ley que regula el estado de alarma como la de medidas excepcionales en materia de salud pública.
P: ¿Hará falta también reformar o aumentar la financiación de la sanidad?
R: El informe no incluye un apartado específico de financiación. Creemos que la cuestión importante no es cuánto dinero más tiene que haber sino cuáles son las reformas que nos van a permitir hacer mejor las cosas cuando el dinero llegue. Obviamente necesitamos más recursos en áreas que son críticas como son la primaria y la salud pública; eso ya no lo discute nadie porque otra de las grandes lecciones que se ha puesto de manifiesto es la debilidad de las estructuras de salud pública.
“Espero que pongan a alguien técnico al frente del nuevo centro Estatal de Salud Pública, no político”
P: ¿A quién confiaría la dirección de ese nuevo Centro Estatal de Salud Pública que ha anunciado el presidente Sánchez de forma inminente?
R: Desde SESPAS ya hicimos nuestras recomendaciones para el centro. Lo que espero es que hay buen criterio y se ponga al frente a alguien técnico. Lo espero por el bien de la institución. Si el perfil es político, no técnico, creo que va a ser un error.
P: ¿Qué sugiere el informe para arreglar el problema que se ha revelado de la atención primaria?
R: En primaria necesitamos que haya una reorganización de funciones, incorporar más profesionales, que haya más autonomía de gestión en los centros y por tanto también más responsabilidad de los centros, y menos ataduras burocráticas.
Otras lecciones aprendidas con la pandemia es que los profesionales tienen buen criterio para adaptarse de forma ágil y eficaz a los problemas con los que se van enfrentando pero eso sólo lo han podido hacer en en estas circunstancias extremas. Porque pasado ese momento vuelven todos los centros a la estricta reglamentación burocrática y eso genera muchos problemas para cuestiones básicas, desde hacer los turnos de personal a contratar o gestionar los recursos económicos de los centros. Esto debe cambiar. Si no arreglamos el problema de la primaria seguiremos cebando el resto de problemas.
"La pandemia nos ha enseñado la fortísima relación entre la salud y la economía”
P: ¿Cuándo cree que dejaremos de ver los efectos colaterales de la pandemia sobre la salud y sobre el sistema sanitario?
R: Empieza a haber una recuperación de los diagnóstico perdidos durante la pandemia, pero tenemos un atasco y listas de espera muy serias y todavía se va a tardar bastante en que consigamos ponernos al día. Todavía no tenemos un análisis muy exhaustivo de las consecuencias que esto va a tener, porque esto lo vamos a ver más en el medio plazo, pero todavía no nos hemos recuperado. No hemos resuelto todavía lo que quedó atascado durante la pandemia.
via Noticias de diariomedico.... https://ift.tt/vFo6q1d
No hay comentarios:
Publicar un comentario