
La Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, Fenin, ha presentado hoy los resultados de un informe titulado Estudio sobre la Fabricación de Tecnología Sanitaria en España y su Internacionalización, con el que busca dibujar un mapa de la situación de las empresas fabricantes y exportadoras de productos sanitarios de nuestro país y plantear una serie de recomendaciones de cara a las Administraciones Públicas y a las empresas.
“Llevamos años advirtiendo que este sector es esencial para la salud y la economía de nuestro país. Pero, a pesar de ello, la incertidumbre económica y la falta de apoyos y de ventajas fiscales, terminaron por estrangular la viabilidad de nuestro tejido industrial, dando lugar a una altísima dependencia del exterior, hecho que la pandemia por la covid-19 ha puesto claramente de manifiesto”, señala Margarita Alfonsel, secretaria general de Fenin.
Menos burocracia
En este sentido, las principales demandas que plantea el estudio son “apoyo institucional en forma de acompañamiento e inversión y menos burocracia, ya que la obtención de permisos, licencias y certificados es una de las mayores trabas que se encuentran las empresas españolas, especialmente pymes y micropymes, para su internacionalización”, afirma Luis Adot, presidente del Sector de Fabricantes, Exportadores y Pymes de Fenin.
En el estudio, que ha sido elaborado por la consultora Agerón Internacional, han participado empresas fabricantes de productos sanitarios y fabricantes de equipamiento hospitalario. Metodológicamente, se han analizado las respuestas de 245 cuestionarios, se han realizado 75 entrevistas en profundidad y todo ello se ha contrastado con estudios anteriores disponibles para analizar la evolución histórica del sector.
“Este trabajo muestra que aún queda mucho camino por recorrer para fortalecer el tejido industrial sanitario de nuestro país si queremos acompasarlo a las actuales necesidades del SNS”, explica Adot,
El estudio muestra que se trata de un sector dinámico, “que está apostando mucho por la investigación, la digitalizacón y la internacionalización, y crece cada año”, según Jesús Centenera, socio director de Agerón Internacional.
Colaboración y competitividad
A su juicio, el de la tecnología es “un sector muy colaborativo, mucho más que otros, donde los clusters fomentan la competitividad y el crecimiento, y que cada vez es más internacional: cerca del 80% de empresas fabrican fuera de España”.
Sin embargo, la principal conclusión que se extrae del estudio es que la fabricación en España podría crecer exponencialmente si se contara con los mecanismos de ayuda adecuados e instrumentos de apoyo estables en el tiempo por parte de las Administraciones Públicas. En este sentido, para hacer frente a los próximos retos sanitarios con solvencia, España necesita incrementar su capacidad productiva tal y como ha demostrado la pandemia. Por su parte, el 16% de las empresas consultadas está valorando la apertura de nuevos centros productivos en España, si bien para ello manifiestan la necesidad de un entorno de apoyo público.
Por ello, el estudio propone una serie de recomendaciones dirigidas a las Administraciones y encaminadas a lograr un mayor apoyo institucional:
- Políticas de compra pública basadas en el valor que aporta la tecnología sanitaria que incorporen criterios de calidad, sociales, medioambientales y de innovación, y contemplen la relación calidad-precio y el conjunto de costes del ciclo de vida del producto.
- Un plan de apoyo al sector a través de ayudas, subvenciones e incentivos fiscales.
- El impulso de la eficiencia de los procesos y eliminación de la burocracia. Asimismo, la agilización de los procesos para la certificación de los productos, tanto del marcado CE obligatorio, como la obtención de otros (calidad, medio ambiente, comercialización…).
- La dotación de mayores recursos a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) y al Organismo Notificado (ON) español.
- Planificación conjunta del abordaje de las necesidades de las empresas, en base a las nuevas demandas de los Reglamentos Europeos de Productos Sanitarios.
- La ampliación de los programas de apoyo en materia de I+D+i y digitalización.
- La ampliación de programas de ayuda e incentivos de cara a la internacionalización de las empresas del Sector, que favorezcan la diversificación de mercados más allá de la Unión Europea.
- La colaboración de todos los agentes para la mejora de la marca España de tecnología sanitaria.
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