Recientemente se ha celebrado una cumbre bilateral entre los representantes colegiales de los médicos de España y Portugal, que ha incluido una reunión con el Ministerio de Sanidad español para comentar posturas comunes en temas como el espacio europeo de datos o el cuidado del medio ambiente. Diario Médico ha hablado con Carlos Cortes, presidente de la Orden de los Médicos de Portugal, para hablar de las líneas de trabajo con sus colegas españoles y el estado de la sanidad en su país, con problemas muy similares a los de España, como la falta de médicos y la situación de Urgencias.
PREGUNTA ¿Qué proyectos conjuntos tienen con la Organización Médica Colegial (OMC) de España?
RESPUESTA. He empezado el mandato hace dos o tres meses. La Orden de los Médicos necesita transformarse, modernizarse y tener una visión diferente para la sanidad de Portugal, que sobre todo se apoye en una posición técnica y científica, no política. Yo no soy político, soy médico. Estamos adaptando la Orden a la modernidad de nuestro país. Un aspecto muy importante es la colaboración internacional para poder intercambiar conocimientos y soluciones. La primera vez que esta junta colegial ha salido de Portugal ha sido precisamente para estar estos días con la OMC. Queremos una relación más próxima con la comunidad médica portuguesa y con otros países de Europa. Estamos desarrollando temas importantes para los médicos que también lo son para los pacientes, como un sistema de acreditación de la formación e intercambios formativos. Además, con la secretaria de Estado del Ministerio de Sanidad de España, Silvia Calzón, conversamos sobre el espacio europeo de datos clínicos. Estamos hablando de formas de colaboración más estrecha que no existían hasta hoy entre las dos organizaciones y con las autoridades, con quien toma las decisiones, de cara al futuro. Esta reunión ha sido un primer paso muy, muy importante.
P. ¿Habría que mejorar algún aspecto en la relación entre España y Portugal en el ámbito de la salud?
R. Una de nuestras ideas es implicar a las autoridades de la salud de ambos países y a los colegios de médicos para hablar. Vivimos en la misma península, pensamos de forma muy similar. Creo que estas sinergias serán muy importantes para el desarrollo de la medicina y la salud de ambos países.
P. ¿Cómo definiría el estado de la sanidad portuguesa? ¿Qué desafíos tiene?
R. El sistema público, el Serviço Nacional de Saúde (SNS), creado en 1979, tiene grandes dificultades, mientras el sistema privado está en una fase de gran crecimiento. Los médicos se están marchando de la sanidad pública porque no tienen las condiciones óptimas de trabajo: no tienen una buena remuneración ni buenas condiciones para investigar o formarse. El sistema público necesita ser más competitivo y atractivo para los médicos, es necesario que el Ministerio de Salud portugués tenga otra visión para el sistema sanitario. Uno de los problemas está en los servicios de Urgencias. Tenemos poco más de 10 millones de habitantes en Portugal y tenemos todos los años más de 6 millones de entradas en Urgencias. No hay ningún país del mundo con una presión como esta. Para dar una respuesta a esta demanda, los médicos tienen que estar en Urgencias y no en las consultas, o en el quirófano, igual que las enfermeras, y la lista de espera para consultas y cirugía es muy grande actualmente. Por tanto debe hacerse una reorganización de toda la respuesta sanitaria de Portugal.
"Las sinergias entre Portugal y España serán muy importantes para la medicina y la salud de ambos países"
P. Al igual que en España, en Portugal tampoco existe la especialidad de Medicina de Urgencias.
R. La Asamblea de la Orden debatió este tema a finales del año pasado, pero decidió no aprobar la especialidad. Creo que el motivo es que el proceso no ha sido bien desarrollado, porque los médicos quieren la especialización, pero no es la solución para estos servicios. Hay otros aspectos muy importantes, como, por ejemplo, que las personas cuenten con un médico de Familia. En Portugal, actualmente 1,7 millones de habitantes que no tienen médico de Familia y curiosamente 900.000 de ellos residen en Lisboa y alrededores. También en el sur del país y en el Algarve hay problemas. En cambio, en el norte, la mayoría de ciudadanos, no todos, sí tienen médico de Familia y la presión en Urgencias es diferente.
P. ¿No tienen los hospitales personal específico para los servicios de Urgencias?
R. Ese es otro problema. La mayoría de los centros tiene profesionales de varios servicios que deben pasar parte de su tiempo de trabajo en la urgencia. En algunos hospitales han experimentado designar equipos fijos, pero no han tenido una buena experiencia. Tiene que haber otra solución.
P. ¿Por qué no ha funcionado?
R. Primero, por la falta de especialidad. Segundo, porque un internista, por ejemplo, quiere estar en la consulta, no solo en urgencias, igual que un cirujano o una enfermera. El gran problema es la presión por Urgencias. En Portugal el 47% de las entradas no son urgencias según el triaje de Manchester y solo un 9% son urgencias que requieren ingreso. Como la respuesta sanitaria en Portugal es deficiente, los pacientes acuden allí para resolver su problema de salud. En Portugal se dice que el sistema es hospitalocéntrico, pero en realidad es urgencias-céntrico, todo está concentrado allí. El gran reto es reformar el sistema de Urgencias.
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